Vélez pagó caros sus errores ante Universidad Católica de Chile, perdió por 2-1 en Liniers un partido que dominó en el primer tiempo e hipotecó sus chances de clasificación en la ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2020.
El conjunto de Mauricio Pellegrino amenazó en ese período que lo tuvo como dominador con intentos de Thiago Almada y Cristian Tarragona, además de una arremetida de Lucas Janson que terminó con la pelota sobre la línea e invocando al VAR para determinar que no fue el gol... aunque quedaron más dudas que certezas.
El conjunto de Mauricio Pellegrino amenazó en ese período que lo tuvo como dominador con intentos de Thiago Almada y Cristian Tarragona, además de una arremetida de Lucas Janson que terminó con la pelota sobre la línea e invocando al VAR para determinar que no fue el gol... aunque quedaron más dudas que certezas.
Para colmo, en la última bola de la etapa -el cuarto de los cuatro minutos de descuento que adicionó Bruno Arleu- Fernando Zampedri se encontró cara a cara con Alexander Domínguez tras una peinada de José Fuenzalida para ajusticiarlo a quemarropa y abrir el marcador. Justo él, que más temprano había salido impune tras haberle volado un diente a Luis Abram.
El complemento no pudo iniciarse mejor para los de Ariel Holan. A los cinco minutos, en una impecable contra, Edson Puch apareció por izquierda y dejó pagando a Domínguez con una definición por el primer palo. Un 2-0 que parecía impensado, pero que da cuenta de la letalidad del ataque trasandino.
Lógicamente, las falencias del Fortín se hicieron más evidentes en medio del desconcierto. Domínguez debió intervenir ante Zampedri y recién promediando la etapa amenazó con una tijera desviada de Tarragona. En clara desventaja en e marcador, el local sintió aún más la salida de Almada -terminó con hielo en el isquiotibial-, la falta por lesión de Ricky Álvarez, el bajo nivel del ingresado Ricardo Centurión y, fundamentalmente, el escaso acompañamiento en la creación para Federico Mancuello.
Igual, en el cierre, los de Mauricio Pellegrino lograron descontar con una palomita de Juan Lucero y aferrarse a una luz de esperanza para el desquite del próximo martes en Chile. Deberá ganar por dos goles o más, un 2-1 a favor forzaría los penales y un triunfo por un gol de diferencia en el que convierta tres o más tantos lo haría meterse en semis. Cualquier otro resultado decretaría su eliminación: panorama complicado, pero no imposible.