El corazón se fisura. Emoción pura. Explota. Las palpitaciones se descontrolan. Felicidad, ansiedad, emoción e Ilusión. Un sentimiento que no encuentra términos para definirlo. Uno camina por las calles del barrio, de la zona y te cruzas con aquellos fanáticos que nacieron con los colores del Expreso y sinceramente, no pueden hablar. Se comunican sólo por lágrimas. Imposible mencionar dos palabras continúas.
Recuerdos de padres, abuelos, vecinos, amigos de la cuadra, hermanos, compañeros de la secundaria, son inevitables. Son esos locos Bodegueros que alentaban durante el primer tiempo en la inmensa popular Este que da a la Costanera, luego en el entretiempo caminaban por debajo de la platea y en el arranque del complemento se ubican en la popular Oeste, la de histórico Tanque. Una costumbre del fanático de Godoy Cruz. Una especie de mística. Por estas razones, la posibilidad de volver a jugar en el estadio Feliciano Gambarte después de 16 años, paraliza cualquier cuerpo. El rumor es cada vez más grande. Y si uno se arrima al estadio y observa que ya están trabajando en el piso, el cosquilleo es cada vez más fuerte.
Por pasión, sentimiento e historia, Godoy Cruz tiene que volver a jugar en su estadio. Su propia cancha. Y sería saldar una deuda que tiene con su hincha, su socio, su fanático y hasta me atrevería a decir, con sus vecinos y amantes del fútbol mendocino. Desde el año 1994, cuando se logró el ascenso al Nacional B, el Godoy Cruz Antonio Tomba se convirtió en la bandera del fútbol mendocino. Recorrió todos los rincones del país y del continente. Único e irrefutable.
Pero, en la actualidad y teniendo en cuenta la situación del Expreso en los promedios del descenso (se acumulan los puntos en este certamen aunque no se pierda la categoría ahora), al equipo de Sebastián Méndez, ¿le conviene jugar en el estadio Feliciano Gambarte?
Con la mano en el corazón, en líneas generales, la respuesta es contundente y es negativa. Por su nuevo estilo de juego, al Tomba no le sería beneficioso jugar en su estadio. De los cuatro rivales que le quedan en Mendoza, sólo con el poderoso River Plate, le convendría jugar en casa. Y justamente, es el último partido que el Expreso jugará en este torneo en el Malvinas Argentinas, un escenario que al equipo Millonario le sienta a la perfección. Es imbatible y acumula 11 triunfos consecutivos.
Repito, hablamos desde lo futbolístico. Los otros tres encuentros que jugará de local y que tienen grandes chances de jugarse en el Gambarte son los siguientes: Arsenal, Central Córdoba y Banfield. ¡Los tres equipos tienen cancha chica! Apuestan a la pelota parada, un fútbol reducido y sólo el Taladro se asemeja al fútbol que está practicando Godoy Cruz: presión alta, asfixiante, equipo dinámico, flexible, con dominio territorial y aprovechamiento total de las bandas. Por ello, un campo grande como el Malvinas Argentinas le vendría a la perfección. El predio de Coquimbito, tiene canchas por doquier y con las medidas exactas al Gambarte, Malvinas Argentinas, Bombonera, Monumental y si buscamos, hasta debe haber alguna con las medidas del Maracaná. Fabuloso. Por esta razón, la adaptación sería lo de menos. Pero, el Tomba, hoy, necesita un campo grande para desplegar su filosofía futbolística.
Y este presente ascendente desde el juego, lo demostró contra Platense el último fin de semana. Una cátedra de juego, actitud y efectividad. Hacía mucho que el Tomba no mostraba esa cara futbolística. Lo logró y ahora el gran desafío será mantenerla. Más allá de los resultados, esa premisa quedó expuesta en Mar del Plata, en Rosario y contra el Calamar. Sólo falló contra Estudiantes acá en Mendoza.
Las remodelaciones del estadio Feliciano Gambarte ya están en marcha. Sin embargo, la última palabra la tendrá el entrenador Sebastián Méndez (más allá de la autorización de AFA), quien allá por el año 2016, en su primera etapa en el Tomba, apoyó de forma incondicional la vuelta de Godoy Cruz al Gambarte.
Las cartas están sobre la mesa. La vuelta a casa nunca estuvo tan cerca, aunque sea provisoria. La pasión desborda cualquier análisis. El Gambarte se viste de gala. Sonríe. Y sus hinchas… derraman lágrimas de felicidad.
La cuenta regresiva por el Centenario, pasó a segundo plano, ahora la cuenta regresiva es con respecto al estadio Feliciano Gambarte. Y en este contexto, el corazón es más importante que la razón.
Fecha 6: Godoy Cruz vs. River Plate (jugará en el estadio Malvinas Argentinas).
Fecha 9: Godoy Cruz vs. Arsenal
Fecha 11: Godoy Cruz vs. Central Córdoba
Fecha 13: Godoy Cruz vs. Banfield