En el otro extremo del mundo, Eduardo Visciglia no puedo ocultar su emoción y no es para menos. Es que hace apenas algunos minutos bajó del podio en el Mundial de Mas Wrestling (fuerza bruta), donde logró el tercer lugar en la categoría absoluta, evento que finalizó ayer en la ciudad de Yakutia de República de Sajá.
“Acá estoy mi hermano en Yakutia, quedé tercero en el mundo, tengo una alegría tan grande que no se puede contar con palabras. Estoy solo festejando, pero feliz de esta medalla”, comentó, en un audio el popular Urso a + Deportes.
Aunque geográficamente Yakutia está a 16 mil kilómetros de Mendoza, más de 33 horas de vuelo y algo más de 23 mil km, tuvo que sortear el Urso para consagrarse entre los tres mejores del mundo en este deporte. Una disciplina que está muy lejos de nuestra tradición, en la cual Visciglia se enfrentó a los números puestos. Sin apoyo oficial, solamente el de su familia, amigos y algunos esponsores, Visciglia pudo costearse los gastos para estar en este evento que se celebró en una ciudad que está prácticamente aislada del mundo y a menos de 400 km del polo norte.
Yakutia está considerada la ciudad más fría del mundo y, durante la primavera y el verano, las noches prácticamente no existen. “Es impresionante, son casi las dos y media de la madrugada y todavía hay claridad. El cielo está de color celeste aplomado, como si fuese un largo atardecer. Es lo máximo que se oscurece en este lugar”, dice asombrado el mendocino, desde algún hotel de la ciudad.
“Ha sido uno de los momentos más hermosos de mi carrera, consagrarme frente a estos monstruos y ocupar el tercer lugar en su deporte. Es una medalla que le tengo que agradecer a mucha gente”, sostuvo el atleta.
Este mendocino, de 47 años, no para de expresar su asombro, no solo por su gran nivel en la competencia que lo llevó hasta el podio y a lograr la medalla de bronce, sino que además fue distinguido por el presidente de la República de Sajá. “¡No lo podía creer! El presidente de este país distinguiéndome. Es que para ellos es el deporte más importante. El cierre del campeonato se hizo en la montaña, que es el lugar tradicional del pueblo sajó. Una fiesta increíble con más de 47 países que participaron”, contó Visciglia.
Además, narró que tuvo más de tres días para llegar debido al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, por lo tanto no todos los vuelos van a Moscú. Por ello estuvo muchas horas varado en los aeropuertos. “Fueron tres días de viaje hasta Yakutia, un día estuve en Moscú, 17 horas en Brasil, otras tantas en Doha (Qatar), además de las de que me demoré de Mendoza a Buenos Aires y de allí a San Pablo”, agregó, el hoy medallista.
-Contanos un poco sobre la competencia...
-Esto ha sido un campeonato extraordinario, espectacular y donde competí en la categoría absoluta de más de 125 kgs. Me enfrenté a los mejores del mundo, entre ellos a Víctor Kolibabchuk, que mide dos metros y pesa 185kg. Este ruso es el (Lionel) Messi del Más Wrestling. También enfrenté a Ale Vero (Hungría), que es el N°2 del mundo y pesa más de 150 kg. Son atletas altísimos y de grandes figuras de este deporte.
-Un podio soñado entre los mejores el mundo
-Yo no lo podía creer, pero ellos tampoco (ríe).
-¿Por qué?
-Estaban sorprendidos de que en la categoría absoluta, un latino había hecho podio mundial. Mucha gente sacándose fotos conmigo. El estadio estaba lleno, porque acá este deportes es el principal y muchos me gritaban: ¡Meeessi, Meeeessi!.
-Despertaste mucho asombro...
-La verdad que sí. Igual todos creían o creen que Buenos Aires es Brasil. Yo les mostraba en un mapa gigante dónde está Argentina y, les señalaba Mendoza, y que hace frontera con Chile.
-Un desconocido en el podio
-Sí, pero además ellos no tenían realmente noción de dónde vengo a competir. Les decía: “acá estoy yo en el otro extremo del mundo” . Y se sorprendían de cuántos kilómetros había hecho para ir a competir y sin ninguna logística.
-¿Por qué sin ninguna logística?
-Es que los demás países vinieron preparados, yo vine solo, sin ningún tipo de compañía. Por ejemplo; el atleta de Togo vino él solo a competir, pero acompañado por el presidente de su Federación, otra persona para lo protocolar y su entrenador. Y eso es diferente, porque al menos uno se siente más acompañado.
-Un tema importante a la hora de competir
-Por supuesto, porque antes de salir a la competencia tenés a alguien que te motive, te ayude o te brinde una mano con un buen calentamiento. Lo cual es muy fundamental.
-Pero por lo visto a vos motivación no te faltó
-La motivación la tuve siempre en la mente, aunque a veces es más la bronca la que uno guarda. Eso de estar buscando ayuda, apoyo, ésto, aquello y corriendo de un lado para otro y además, tenés que entrenar. Imaginate que a todos le daban una medalla de honor y llevaron un presente típico del lugar del cual venían. Yo no les di nada a nadie. No tenía, pero además, hasta eso fui a pedir si podían darme algo típico de nuestra región para traer y no pasó nada.
-Es para sentirse orgulloso
-Sí, porque además fui el único atleta de América del Sur. Hubo una chica colombiana participando, pero vive en Yakutia desde hace tres años. El único latino fui yo; el Urso. Por eso es algo que quiero agradecerle a mi familia, amigos, a Dios y los sponsors que son muchos y a toda esa gente que siempre me ayuda.
El orgullo de estar a la “altura” de Messi
El Mas Wrestling es el nombre internacional utilizado de este deporte tradicional en Yakut (Yakutia) y que hace alusión a la fuerza de los bastones. Fuerza bruta de atleta contra atleta.
El Urso, comenzó con esta actividad hace casi 20 años cuando vivía en San Pablo, Brasil. La fuerza bruta lo llevó a ser el hombre más fuerte del Cono Sur en su momento y desde hace alrededor una década comenzó a practicar el mas-wrestling.
“Es un deporte muy tradicional en Yakutia, donde en el invierno las temperaturas llegan a 50 grados bajo cero. Y en el verano no oscurece nunca. Estaban todos tan sorprendidos de que hiciese podio, que cuando subí algunos me gritaban: ‘Mee-si, Mee-si’, eso fue impresionante para mí”.