Andrés Merlos es árbitro de fútbol y presidente de la Liga Alvearense de fútbol. Pero por encima de todo, es un hombre polémico. Su personalidad y forma en que suele llevar adelante su trabajo como referí, despiertan pasiones y odios. Nada de grises. El cielo o el infierno. Y en las últimas horas, la vida del sanrafaelino parece haber tocado un capítulo malo, de esos que casi nadie quiere escribir. Tras el grosero error cometido en el juego entre Boca Juniors y Talleres, por Copa Argentina, el hombre de negro vivió un duro cruce con Andrés Fassi, presidente de la T, quien lo denunció por agresión y ayer disparó munición gruesa (ver aparte). Como para exponer aún más al controversial árbitro mendocino, de 43 años, ayer trascendió un video donde se ve que le lanza un golpe de puño a la máxima autoridad de la “T”.
Las últimas semanas no han marchado bien para el oriundo de San Rafael. Recientemente se le rescindió el contrato como encargado del Colegio de Árbitros de ese departamento. ¿El motivo? “Reiteradas quejas de jugadores y dirigentes respecto de la soberbia con que se maneja y los hombres que lo secundan, quienes parecen desconocer el reglamento, ofreciendo pésimos arbitrajes”, según una fuente consultada.
Todo en medio de distintas decisiones que tomó Merlos, que lo fueron acercando aún más al ojo de la tormenta. Hace un tiempo se erigió como presidente de la Liga Alvearense, tras una propuesta elevada por Colón, de ese departamento. Ante la ausencia de más candidatos, fue electo, pese a que el estatuto no lo permite por la “falta de avales y la incompatibilidad de cargos”.
“Al ser un árbitro internacional, muchos le temían. Ahora hay mucha preocupación porque la Liga Sanrafaelina podría ser intervenida por el Consejo Federal”, declaró Alfredo Barroso, periodista de General Alvear, en el programa radial Otro Fútbol. “En el Consejo Federal están enojados por la decisión”, amplió.
Según trascendió, el ente regido por la AFA dejó entrever su malestar y ahora los clubes sanrafaelinos temen por las plazas para el próximo Regional Amateur.
Pero Merlos no parece querer bajar el tono a la polémica. En los últimos días se conoció que cerca de 40 árbitros sanrafaelinos “emigraran” a General Alvear, con la intención de asumir la dirección de todos los compromisos del fútbol de ese departamento, “planchando a los locales”.
Merlos, cuando la rescisión de su contrato era un rumor, también habló en el Otro Fútbol y se mostró desafiante: “Dejamos el nivel del arbitraje sanrafaelino muy alto; ojalá lo puedan mantener. No sé de dónde irán a traer un nuevo encargado, porque si van a mejorar, tendrá que ser un instructor FIFA. Ojalá el que venga, supere el trabajo nuestro. Me sorprende porque desde el Consejo Federal me expresaron su conformidad por lo que veníamos haciendo. Yo no tengo confirmación de esto que ustedes me están diciendo”.
Ayer, luego de lo ocurrido con Andrés Fassi en las entrañas del Malvinas Argentinas, trascendió que Merlos denunció al presidente de Talleres, bajo la caratula de “amenazas agravadas”. El sanrafaelino realizó el trámite de manera virtual ante el Ministerio Público Fiscal de Mendoza. La causa ahora está en manos del fiscal Gustavo Stroppiana Gómez. Esto se suma a los dos expedientes que le abrirán a la autoridad del club de barrio Jardín, de parte del Tribunal de Disciplina y de Ética, respectivamente.
Para indagar un poco más sobre el momento que atraviesa, Diario Los Andes intentó comunicarse con el sanrafaelino, pero no respondió a los mensajes de este cronista.
Fassi disparó contra el Chiqui Tapia
El escándalo posterior a la victoria de Boca sobre Talleres por la Copa Argentina no cesa. Ayer, el presidente del conjunto cordobés, Andrés Fassi, desmintió la denuncia del árbitro Andrés Merlos sobre la presencia de un arma de fuego en la zona de vestuarios y lo acusó de ser uno de los “cuatro o cinco serviles” a la dirigencia de AFA encabezada por Claudio Tapia.
“Beligoy hace lo que Chiqui Tapia le pide. Sigo creyendo en el arbitraje argentino. Merlos, desde hace más de tres años, nos viene perjudicando”, dijo.
Y aclaró: “Hablo de Merlos, no del arbitraje del fútbol argentino. Hay cuatro o cinco árbitros serviles o abanderados que empañan a ese 85% de arbitraje honesto. Son enviados para perjudicar o beneficiar”.
“Me parece injusto que siendo campeones del mundo, teniendo una AFA enriquecida, siendo el segundo país exportador de jugadores, no nos demos un debate. Es una barbaridad lo que pasa en el fútbol argentino”, lamentó.