Después de algunas horas de zozobra e incertidumbre, San Lorenzo se expidió oficialmente sobre la denuncia que realizó Daniel Vila, presidente de Independiente Rivadavia, por el envío de un “comprobante trucho” de transferencia que derrumbó el pase del mediocampista Matías Reali. Desde el Ciclón argumentaron que la cuenta del cuadro mendocino “no se encontraba operativa” y que están a la espera de que les pasen una nueva para realizar la transacción.
“San Lorenzo se manejó muy mal con el tema Reali. Nos estafaron, nos enviaron un certificado de transferencia trucho. El pase está caído”, lanzó el empresario en una entrevista con Radio La Red. Sin embargo, en el escrito que publicó el elenco de Boedo en su cuenta de Twitter no hicieron mención ni siquiera a esta situación.
“Debemos destacar la buena fe de nuestra institución en pos de que se concrete la compra que aquí nos ocupa, teniendo presente la total conformidad y disposición de Matías Reali para jugar en San Lorenzo. También informamos que se intentó notificar a Independiente de esta situación imprevista y llevar adelante la operación. Sin embargo, no hubo respuesta”, dispararon mediante redes sociales.
Por último, el comunicado cierra con un pase de facturas y lanza la pelota hacia terreno mendocino: “Ante esta situación, la totalidad del dinero ha sido notarialmente puesta a disposición de Independiente Rivadavia, estando San Lorenzo a la espera de que el Club vendedor informe una cuenta bancaria habilitada y/o proceda a re-habilitar la oportunamente informada en el contrato de cesión, a fin de que se pueda concretar la transferencia del monto acordado”.
La polémica llega en el momento menos oportuno para la vida económica del Ciclón. A la espera de vender a Adam Bareiro a River, los Gauchos de Boedo están inhibidos y no pueden utilizar a ningún refuerzo hasta que no ordenen sus cuentas. En paralelo, le pidieron más dinero a Boca para un hipotético traspaso de Agustín Martegani, pero el Xeneize, que ya incorporó a Tomás Belmonte, desistió de subir su oferta.
De todas formas, no dejaron de lado el hecho de que la primera parte de la transferencia del volante de 27 años -500 mil dólares- la hicieron en efectivo al momento de la firma del contrato, que se cerró en 1,8 millones de USD por el 100 por ciento del pase. El problema de este tire y afloje es que todo se presentó algunos días después de que el jugador viajara con el plantel de Leandro Romagnoli hacia Uruguay para una mini pretemporada. Incluso, apareció en el amistoso que perdió por 2-0 frente a Progreso en Montevideo.