Deportivo Maipú rescató agónicamente su primer punto de la temporada ante Guillermo Brown en la ciudad de Puerto Madryn, en el marco de la quinta fecha de la zona A de Primera Nacional, gracias al gol de Matías Viguet en el minuto 51 del segundo tiempo.
Se acordó tarde, cuando se vio con la soga al cuello y sumaba su quinta derrota en igual cantidad de presentaciones. Un panorama duro que paso de renovar ilusiones a vivir una pesadilla. Pero al menos, esta vez, pudo sumar. Un festejado empate ante Brown en Puerto Madryn. Punto que pudieron ser tres, pero que el árbol no tape al bosque. Fue a los ponchazos, sin ideas, al todo o nada, sin el fútbol de otrora. Aunque claro está, es un plantel casi nuevo en su totalidad y hay que acomodar piezas, pero por ahora la idea futbolística no está y siguiendo así serán más las unidades que se dejen en el camino que las que se ganen.
El encuentro mostró un arranque parejo, con ambos tratando de salir rápido de la línea media. Fue así que Del Priore encontró a Ortíz en carrera y el exarquero del Lobo mendocino, Giovini, estuvo rápido para evitar lo que pudo ser el primero de la tarde. Con el correr de los minutos, al Cruzado le faltaba más participación de sus volantes creativos para que Márquez, en su afán por entrar en contacto con el balón, no retrocediera tanto y dejara despoblada el área. Brown, por su parte, tampoco era una tromba, aunque cuando la redonda pasaba por los botines de Luayza, se mostraba peligroso. De todas maneras, la más clara se dio tras un pelotazo hacia la izquierda por donde Machado aprovechó que Ostachuk no estaba en el campo y que Moyano ocupaba otra posición, remate de zurda y con lo justo apareció Prieto: córner.
Ya sobre la media hora, la visita pareció haber encontrado la fórmula para saltar la línea de volantes sin la necesidad de sacar pelotazos, sin embargo, faltaba claridad. Nada por aquí, nada por allá. Lo mismo que el Brown de Madryn. De hecho, ambos mostraban en el juego la actualidad en la tabla, con una anemia ofensiva sorprendente, y en el caso del visitante, confundiendo los caminos. En el tramo final, cuando daba la impresión de que los dos se habían enamorado del cero a cero, Luayza recibió frente de la media luna del área, la paró de derecha y ensayó un zurdazo que se fue apenas afuera.
En el ST, el Cruzado era el que mejor estaba parado, pero llegó un córner desde la derecha y Bazzana que le gana a Ostachuk para superar la resistencia de Rehak y poner el 1-0 de cabeza, tras el rebote en el propio defensor Cruzado. Increíble. Nada le sale a este Maipú 2024, que con nuevo trío de ataque (Sosa, Ortega y Almirón) empezó sumando intentos hacia Giovini y juntando gente en procura de encontrar el empate. Esa llegó tras un centro desde la derecha para la cabeza de Almirón que Giovini sacó al tiro de esquina. Luego, Viguet la tiró por arriba casi abajo del arco. Y cuando la resignación se apoderaba de sus hinchas, Viguet tuvo revancha y le cruzó el remate a Giovini para el 1-1. Eso no fue todo. Vega estrelló un cabezazo en el travesaño en el cierre, que pudo ser el de la victoria.
