El árbitro mendocino Fernando Espinoza quedó en el ojo de la tormenta tras la victoria 2-1 de Boca frente al líder, Atlético Tucumán, este último domingo en La Bombonera por la Liga Profesional.
Es que el referí decidió no cobrar penal ante una acción que luego fue muy discutida: el peruano Zambrano golpeó con el codo derecho en la cara a Maestro Puch a segundos del pitazo final dentro del área azul y amarilla.
Las imágenes dan cuenta de lo que perfectamente pudo haber sido sancionado con tiro penal y hasta tarjeta para el defensor Xeneize, aunque Espinoza no interpretó eso y decidió continuar con la jugada, que derivó en saque de arco para Agustín Rossi.
“Interpretamos lo mismo con el VAR. Luego de ver la jugada, sigo convencido. Si sacamos la foto, es roja y preso. Pero hay que ver el movimiento general y ahí no hay penal. Es un brazo apoyado”, sentenció Espinoza en el pos partido en declaraciones a TyC Sports.
A lo que añadió: “Hay que ver el movimiento general, hay que ver dónde termina el brazo”.
“Si culpamos al árbitro en una derrota, preguntémonos también por qué Atlético Tucumán está puntero”, deslizó Espinoza. Esta última frase generó más fastidio en los hinchas tucumanos.