El duelo entre Boca y Racing por la ida de cuartos de la Copa Libertadores se anticipaba como el partido picante, teniendo en cuenta los antecedentes inmediatos de ambos bandos y la polémica entre Benedetto y Almendra.
Otro jugador con el que existía grandes expectativas era Juan Fernando Quintero, quien fue asignado al banco de suplentes y que recibió los silbidos atronadores de los Xeneizes en la antesala de su ingreso al campo de juego de la Bombonera.
Fue a los 61 minutos cuanto el cuarto árbitro levantó el cartel para indicar la salida de Gabriel Hauche y el ingreso del colombiano. Este se acomodó el pantalón, la camiseta y movió su cuello para cada lado. Mientras recibía las indicaciones de un asistente de Fernando Gago, el volante volvió a acomodar su vestimenta.
Fue allí que las cámaras de la transmisión oficial se fueron con la tribuna de Boca, quienes abuchearon al futbolista, quizás por el mal trago que significó la final de Madrid de 2018, donde Quintero convirtió un golazo clave para la obtención del título millonario.
Mientras la hinchada silbaba al futbolista, el colombiano llevó su mano derecha hasta sus partes íntimas, se tomó una y otra vez mientras frotaba con su lengua el labio inferior. Luego miró hacia atrás, de donde venían los silbidos, se rio y lo último que hizo antes de entrar fue aplaudir y frotarse las manos.
Boca y Racing empataron en un partido de alto voltaje
Boca y Racing empataron sin goles en La Bombonera por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, en un durísimo duelo que marcará el rumbo de este torneo continental.
El pase a las semifinales se definirá la próxima semana en el Cilindro de Avellaneda, donde la Academia será local ante su gente. Hay que decir que el partido fue trabado por el duelo táctico que plantearon Jorge Almirón y Fernando Gago. El entrenador xeneize dispuso una formación con Edinson Cavani como único delantero, mientras que el DT racinguista puso en cancha un equipo que peleó más de lo que jugó.
Este encuentro estuvo marcado por dos jugadas polémicas, donde el árbitro Wilton Pereira Sampaio anuló un gol de Cavani porque había dos pelotas en la cancha, pero eligió no expulsar a Marcos Rojo por un codazo a Maxi Romero. Debemos informar que esta serie se definirá el próximo miércoles y ambos equipos necesitan ganar, ya que no hay gol de visitante.