El 22 de junio de 1986, Diego Armando Maradona convertiría ante Inglaterra dos de sus goles más icónicos en los Mundiales. Aquel polémico con la mano (”La mano de Dios”) y el mejor de todos los tiempos, el del Siglo, apilando rivales y desparramando su talento ante los ojos del mundo.
Si bien el relato más conocido es el de Víctor Hugo Morales y su “barrilete cósmico”, hubo también otras narraciones que al escucharlas emocionan, ponen la piel de gallina, a 35 años de aquella gesta única.
La primera es la de José María Muñoz, histórico relator radial y uno de los referentes en la materia. Con la garganta en la mano, Muñoz determinó en ese preciso instante que lo que acaba de ocurrir era nada menos que el mejor gol en las Copas del Mundo.
Además, un compilado de relatos de la TV japonesa, inglesa, brasilera y mexicana.