La policía japonesa anunció hoy que encontró al atleta de Uganda que había desaparecido el viernes pasado luego de haberse escapado del alojamiento donde junto a la delegación de su país se preparaba para los Juegos Olímpicos de Tokio, incumpliendo la normativa de aislamiento impuesta por los organizadores.
El deportista es el levantador de pesas Julius Ssekitoleko, quien al escapar dejó un mensaje donde manifestaba su deseo de “permanecer en Japón” para trabajar en ese país y “dejar atrás” las dificultades en su nación de origen, según explicó la delegación ugandesa y consignó el periódico catalán Mundo Deportivo.
El deportista de 20 años fue encontrado por la policía en la prefectura de Mie (centro de Japón), adonde se supone que viajó tras desplazarse en tren de alta velocidad desde Osaka en el oeste, la región donde se había instalado el equipo ugandés para prepararse con vistas a los Juegos que se iniciarán el próximo viernes.
Según esta previsto Sselitoleko regresará a Uganda y no podrá participar en los Juegos de Tokio, debido a que no “cumplía” los requisitos necesarios para competir en la prueba de halterofilia, según señaló la delegación ugandesa.
El deportista había desaparecido de su hotel el último viernes dejando su pasaporte y sin presentarse a la prueba obligatoria del control de coronavirus al que debía someterse ese mismo día, y desde entonces estaba siendo buscado por las autoridades niponas.
El director ejecutivo del comité organizador de Tokio 2020, Yoshiro Muto, afirmó hoy que se trata de un caso “muy confuso” y señaló que los anfitriones estudiarán “posibles sanciones al atleta” una vez se esclarezcan los detalles de lo sucedido, al ser preguntado por el tema en una rueda de prensa.
La estricta normativa elaborada para la celebración de los Juegos “burbuja” de Tokio en mitad de la pandemia prohíbe a los deportistas u otros participantes del evento desplazarse hasta ningún lugar que no sea su hotel, su lugar de entrenamiento o localizaciones previamente aprobadas por la organización.