El jinete australiano Shane Rose, renombrado medallista olímpico y ya clasificado a los Juegos París 2024 en equitación, protagonizó por estos días una enorme polémica en su país. Habituado a presentarse en competencias de su disciplina con diferentes disfraces, eligió para un certamen en Nueva Gales del Sur un traje de baño inspirado en el protagonista de la película Borat y prácticamente cabalgó semidesnudo, lo que casi le saca el boleto para la cita olímpica.
La prenda de la discordia era un mankini, una tanga que en vez de ajustarse a la cintura consigue tirantez con unos tiradores que llegan hasta los hombros. En efecto, apenas si cubrían la zona genital dejando la trasera fuertemente expuesta.
La imagen motivó que la Federación Australiana recibiera quejas sobre esa vestimenta, y una advertencia sobre sanciones de descalificación a la gran cita. La amenaza cundió rápidamente en las redes sociales, donde se generó una campaña en apoyo al atleta.
Rose debió así apresurarse a pedir disculpas, mientras que, como sucede cuando los hechos traspasan largamente lo esperable, las autoridades no lograron encontrar artículo del reglamento que prohibiera los actos del deportista. Eso sí, prometieron crearlos para evitar futuras reincidencias. Según el diario The Guardian, el jinete podrá continuar con la preparación intentando mejorar en Francia sus performances de Beijing 2008, Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020, donde cosechó medallas de plata y bronce.
La palabra de Shane Rose tras el escándalo
“No necesito hacerlo de nuevo. Me siento cómodo con mis decisiones pero, debido a que alguna persona sin rostro presentó una queja, en las últimas 24 horas han sucedido muchas cosas que no son agradables. No recomendaría un tanga a nadie, no es un equipo cómodo, y cuando subís a un caballo, lo es aún menos. Fue escandaloso el mankini-gate”, reflexionó quien también supo lucir en otras ocasiones disfraces de Súper Mario, El Hombre Duff de Los Simpsons y Buzz Lightyear, personaje de Toy Story.