“Golpearon la puerta de la humilde casa, la voz del cartero muy clara se oyó... Y el pibe corriendo con todas sus ansias al perrito blanco sin querer pisó...” (”El Sueño del Pibe”, de Enrique Campos).
Casi 7 meses pasaron desde aquel martes 25 de enero en que Matías Busto llegó a la concentración del Club Atlético Lanús procedente de Fray Luis Beltrán (Maipú, Mendoza) para convertirse en jugador de fútbol de la Novena del Grana (categoría 2008) y con solo 13 años. En el medio, el 14 de junio, “la joya beltranina” cumplió 14 años. Y el lunes pasado, 15 de agosto, Mati tuvo su debut soñado, ese que anhela cualquier futbolista: jugó su primer partido con la camiseta argentina. Fue durante el amistoso que el Sub 15 de Argentina disputó con el combinado de la Liga Casildense, en Santa Fe. Y fue con triunfo 2 a 1 para la celeste y banco (que jugó con camiseta azul ese partido).
“’¡Mamita! ¡Mamita!’, se acercó gritando, la madre, extrañada, dejó el piletón... Y el pibe le dijo, riendo y llorando, el club me ha mandado hoy la citación¨ (Más de “El Sueño del Pibe”).
Mati, quien juega al fútbol desde que tiene 4 años y comenzó jugando al fútbol de salón para luego pasar al fútbol 11 y en césped natural, fue parte del segundo equipo de la selección que jugó el lunes en Santa Fe. Y lo hizo con la 20 en la espalda y con el disfrute de estar viviendo el momento con el que soñó toda su vida. Ya a fines de julio había sido citado para el seleccionado nacional y con este partido culminó su primera convocatoria. “Ahora paran por unas semanas, pero en los próximos días seguirán con novedades y tendrán nuevas fechas”, cuenta Jorge Busto, padre e hincha número 1 de Mati, a Los Andes.
“Mamita querida ganaré dinero, seré un Maradona, un Rojita, un Boyé... Dicen los muchachos del Oeste Argentino que tengo más tiro que el gran Bernabé...” (Sigue “El Sueño del Pibe”).
“”Me escribió el profe del club para contarme que había quedado preseleccionado para el Sub 15 de la Selección Argentina. Venía de tomar la mediatarde con mis viejos, leí la noticia en voz alta y me largué a llorar. ¡No lo podía creer!, Es el sueño de cualquiera, ¡no lo podía creer cuando recibí el mensaje! Al día siguiente en casa hicimos unos ravioles al disco para celebrar”, contó Mati a Los Andes a fines de julio, horas después de haber recibido la esperada noticia. El adolescente había venido a Mendoza a visitar a su familia, pero debió regresar casi de urgencia para presentarse en el predio de la AFA en Ezeiza el lunes 25 de julio.
“¡Vas a ver qué lindo cuando allá en la cancha mis goles aplaudan, seré un triunfador! Jugaré en la quinta, después en primera, yo sé que me espera la consagración...” (Más de “El Sueño del Pibe”).
Tras un paso efímero por Godoy Cruz Antonio Tomba cuando apenas tenía 4 años, Jorge y Laura (padre y madre de Mati) se mudaron a Fray Luis Beltrán. Y allí fue donde Matías explotó, futbolísticamente hablando. Primero lo hizo en el fútbol de salón del Club Cooperativa Norte, mientras que después pasó a la categoría 2008 del Club Fray Luis Beltrán (“El Fraile”).
En 2018, Lanús hizo una prueba de jugadores en Palmira (San Martín) y hasta allí fueron Matías, Jorge y Laura. El Granate eligió a Matías para una segunda etapa, y no se equivocó: el beltranino respondió con 5 goles en el primer partido que jugó ya en Buenos Aires.
“Dormía el muchacho y tuvo esa noche el sueño más lindo que pudo tener... El estadio lleno, glorioso domingo, ¡por fin en primera lo iban a ver! (“El Sueño del Pibe”).
De 11, por la izquierda, de 7, de 10 y hasta de doble 5. Esos son los puestos donde Matías Bustos se desenvuelve en la cancha y donde pasa a convertirse en “la joya beltranina”. Tras ser elegido por el club bonaerense, en enero de este año Matías firmó su primer contrato con Lanús y se mudó a la pensión del club ubicado en la Provincia de Buenos Aires, al Sur de CABA. Allí se mudó toda su vida también, con escuela incluida, y con entrenamientos prácticamente todos los días de su vida.
“Faltando un minuto, iban cero a cero... Tomó la pelota, sereno en su acción. Gambeteando a todos, enfrentó al arquero, y con fuerte tiro quebró el marcador” (“El Sueño del Pibe”).
En los casi 7 meses que lleva ya jugando para la Novena de Lanús, Mati ha vivido un hermoso sueño (que corona con esta primera convocatoria al Sub 15 de Argentina). Entre sus partidos inolvidables, destaca aquel que dieron vuelta contra Boca y donde él convirtió el gol del empate transitorio, para que luego su compañero en la delantera lo definiera a favor de Lanús.
“Siempre soñé con esto, mi sueño es llegar a la selección mayor y jugar el mundial”, se sinceró Mati hace poco menos de un mes en diálogo con Los Andes. Y sus palabras recuerdan a aquellas que quedaron inmortalizadas en un video y que salieron de un también adolescente Diego Armando Maradona. Palabras que quedaron registradas en un potrero de Villa Fiorito, casualmente a menos de 5 kilómetros de la pensión de Lanús donde está viviendo desde enero el mendocino Matías Busto.