Barcelona consiguió un triunfo importante ante el Athletic Bilbao por 1 a 0 y le sacó tres puntos de ventaja al Real Madrid en la lucha por La Liga de España. Sin embargo, el nivel futbolístico es preocupante.
Mientras todos los focos estaban puestos en ver si llegaba el gol número 700 de Lionel Messi, el Culé demostró que tendrá que mejorar si quiere ganar el torneo y luchar por la Champions League.
Fue un partido muy denso y que tuvo a un Barcelona previsible y con poca sorpresa en ataque. Poco para rescatar del primer tiempo y no mucho en la segunda mitad.
Uno de los puntos llamativos sigue siendo Antoine Griezmann, que llegó hace casi un año por 120 millones de euros y no logra demostrar todo el potencial que tiene.
El francés prácticamente no participó del juego y fue reemplazado por el joven Ansu Fati, quien demostró con velocidad y gambetas que puede sacarle su lugar en el equipo titular.
El gol llegó a los 71 minutos tras un pase de Messi dentro del área para Iván Rakitic, quien quedó cara a cara con el arquero y definió con calidad.
Cerca del final Messi tuvo dos claras situaciones de gol, pero los remates se fueron apenas desviados. El festejo número 700 se hace desear.