El presidente del Ankaragucu, Faruk Koca, le pegó una trompada y noqueó al árbitro Umut Meler después del empate del argentino Adolfo Gaich a los siete minutos de tiempo adicionado para el 1 a 1 del Rizespor por la Superliga turca.
Durante la protesta de los futbolistas del Ankaragucu hacia el árbitro Meler, el mandamás del club bajó desde el palco por las escaleras e ingresó al campo de juego para darle una trompada al juez del encuentro, quien quedó noqueado en el suelo y fue defendido por varios miembros de seguridad de más ataques de parte de los locales.
El encuentro lo comenzó ganando el local, con el tanto de Olimpiu Morutan, a los 14 minutos de juego, pero en el complemento el partido se calentó y a los 50 el delantero Ali Sowe vio la roja tras una doble amonestación.
Para el malestar del presidente Koca, el árbitro adicionó siete minutos y, a pesar de la expulsión de Emirhan Topcu para el Rizespor, el argentino surgido de San Lorenzo empujó la pelota después de un cabezazo y empató el partido en el final, lo que desató el caos.