La jocketa mendocina, Florencia Giménez, evolucionó favorablemente en su cuadro clínico, tras permanecer bajo cuidados especiales desde el 17 de abril cuando sufrió una rodada en el Hipódromo de Palermo.
Giménez “evoluciona favorablemente a la terapéutica instaurada con grandes mejorías de su estado general”, señaló un parte médico oficial difundido por el Hipódromo de Palermo.
“Particularmente, recuperó la deglución lo que le permite alimentarse por sus propios medios”, detalló el informe y agregó que “tampoco requiere la utilización de corset, ni collar cervical y cognitivamente se encuentra sin alteraciones”.
Las noticias son alentadores dado que las lesiones que había sufrido hacían temer por su recuperación.
La jocketa se accidentó en la 9na carrera del 17 de abril en el Hipódromo de Palermo cuando montaba a la yegua Casta y Pura, perteneciente a la caballeriza Juan Demetrio y a cargo del entrenador Roberto Caroprese.
Giménez es ahijada del reconocido entrenador mendocino Enrique Rivamar.
Cabe recordar que la actividad hípica organizó un remate de servicios de SPC para ayudar a sus padres Alberto y Graciela debieron abandonar su casa frente al Hipódromo de Mendoza e instalarse en la Capital Federal sufriendo el desarraigo con un volumen de gastos que no están en condiciones de afrontar.
