El final de la temporada está muy cerca y si bien Boca apunta su atención a ganar la Copa Argentina que le de boleto a la próxima Libertadores, y cuando aún no tiene definido a su entrenador para 2024, empiezan a cobrar fuerza algunos cambios que se darán en el plantel de cara al próximo año por jugadores que no tienen lugar, otros que finalizan su vínculo y aquellos que pueden ser vendidos.
Hay dos experimentados que terminan su contrato el 31 de diciembre y hay pocas probabilidades de que les renueven. Se trata de Facundo Roncaglia y Diego González. El entrerriano de 36 años llegó a mediados de 2022 y durante este año tuvo mucha participación en la Liga Profesional por el recambio al que apostó Jorge Almirón. Ya en la Copa de la Liga comenzó a jugar menos y es la quinta opción en una zona en la que hay nombres como Nicolás Figal, Marcos Rojo, Nicolás Valentini, Bruno Valdez y hasta el juvenil Aaron Anselmino.
En tanto, el Pulpo ha tenido varios inconvenientes con las lesiones desde su llegada en 2020. Solo pudo disputar 44 partidos en el Xeneize y pocas veces con continuidad. En este 2023 tuvo participación en apenas siete compromisos, ninguno como titular, y su poca actividad hace pensar que no le renovarán. En cambio, a Rojo, que también se le terminaba el vínculo a fin de año, ya le extendieron hace unos meses.
Por otra parte, aunque aún tienen contrato, hay otros casos de jugadores que ante la poca participación podrían buscar cambiar de aires. Por ejemplo, Norberto Briasco es otro de los que ha tenido inconvenientes con las lesiones desde que fue refuerzo a mitad de 2021. El futbolista de 27 años, quien juega en la selección de Armenia, nunca pudo asentarse como titular. Este año estuvo de entrada solo en siete partidos de 22 que disputó y por haber quedado atrás en la consideración puede ser negociado aunque su contrato termina recién en diciembre de 2025.
Muy similar es la situación de Juan Ramírez, que en esu momento sí llegó a ganarse un lugar en el equipo, pero el bajo rendimiento terminó por relegarlo por completo y si bien acostumbra a ocupar un lugar entre los suplentes, es pocas veces utilizado. Desde la asunción como interino de Mariano Herrón, incluso han sido priorizados algunos juveniles. Este año disputó 13 encuentros como titular y tuvo acción en otros diez, especialmente cuando Boca paró un mix. Su vínculo vence en diciembre de 2026.
Por último, el caso que más atención despierta en los hinchas de Boca es el de Valentín Barco. A diferencia de los antes mencionados, el Colo es la gran aparición del equipo en este 2023 y tuvo muy buenos rendimientos desde el primer momento, más allá de que hoy pueda atravesar algunos altibajos. Sin embargo, la joyita azul y oro es pretendida por los grandes de Europa, en el último mercado lo buscó el Brighton y Manchester City, pero se quedó a jugar la Copa. ¿Qué sucederá ahora? Su cláusula es de 10 millones de dólares.
No obstante, no hay que descartar que algún elenco europeo pueda venir a la carga por algún otro juvenil, especialmente luego del buen nivel mostrado a lo largo de la Libertadores por varios chicos formados en el club como Valentini, Ezequiel Fernández y Cristian Medina. Incluso, en el medio de la Copa fue vendido Alan Varela, otro criado en la institución.