El mundo del rugby quedó muy dolorido por la muerte de Lucas Pierazzoli, de Hurling, consecuencia de un choque de cabezas en el partido ante SITAS, del último sábado. Dentro de la tremenda angustia, la familia decidió cumplir la voluntad del rugbier y donó sus órganos. Y ya salvó dos vida, según confirmó uno de sus hermanos a TN.
“Ahora sabemos que Lucas sigue viviendo en otras personas”, contó Mateo Pierazzoli. Apenas los médicos del Hospital Posadas confirmaron que lo de Lucas era irreversible, la familia decidió cumplir con la voluntad del joven de 28 años.
“Lucas ya era donante de órganos”, agregó Mateo “Siempre ayudó a la gente, siempre se preocupaba por quienes lo rodeaban, pero también por muchos a quienes no conocía, por eso esto es lo que él hubiese querido y estaría muy feliz al saber que alguien vive en parte gracias a él”, afirmó en diálogo con la señal de noticias.
A pesar del duro momento, su familia puede estar orgullosa de la generosidad de Lucas Pierazzoli, quien tuvo la voluntad de ayudar a otras personas en todo momento. Sin lugar a duda, esta acción realizada por el rugbier y su familia le dará a otra persona la posibilidad de vivir, y mantendrá el recuerdo de Lucas intacto.