Si será el jueves 9 de septiembre o no, eso ya no depende de las autoridades sino que es la pelea FIFA-ligas europeas, con la Conmebol expectante y confiada en que todo se jugará como fu programado. Lo que es seguro, según se oficializó este viernes, es que el partido con Bolivia en el Monumental (el segundo de la serie de tres programada) irá con un aforo del 30%. A pocos días de las primeras elecciones, la decisión es que por primera vez en pandemia haya más que allegados en un encuentro.
Los requerimientos para poder ir a la cancha serán mínimos: registrarse en la aplicación cuidar y llenar una declaración jurada con respecto al estado de salud, confirmando que no hubo contacto estrecho con algún contagiado y más. Luego, obvio, moverse con tapabocas. Y evitar cualquier tipo de aglomeración.
No habrá necesidad de presentar un test negativo de PCR (tienen un costo de 7.000 pesos o más). Tampoco un certificado de vacunación será imprescindible, según se decidió en la reunión que mantuvo Carla Vizzotti (Salud), Matías Lammens (Turismo y Deportes, que por la tarde estuvo en Mar del Plata) y más autoridades de Ciudad y de Nación. En los países europeos, hay distintas definiciones con respecto a los ingresos.
Eta prueba piloto será sólo con la Selección y que luego se analizará cómo se hará en la Liga Profesional, si la metodología será igual o habrá más obligaciones para ir a la cancha. En los alrededores del estadio habrá mucha seguridad para evitar aglomeraciones y traslados de grandes grupos, con el objetivo de que se mantenga la distancia social más allá de que el evento sea al aire libre.
