La figura de Sergio Germán Romero volvió a imponerse. Y aunque ahora, a diferencia de las anteriores cuatro definiciones por penales, no tuvo que esforzarse por atajar ninguno, su imagen, su seguridad, su mirada y su personalidad achicaron a los adversarios. Todo eso pesa en los rivales cuando van a patearle un penal.
Esta vez lo sufrió Talleres y Boca pasó a la semifinal de la Copa Argentina, luego del 1-1 en los 90′. Hubo dos pateadores, Nahuel Bustos, con experiencia en Europa, y Benavídez -el que abrió la cuenta para la “T”-, que no tuvieron el suficiente carácter para patear con la tranquilidad debida y remataron a las nubes. Y en eso sin dudas tuvo que ver el hecho de tener enfrente al ex arquero de la Selección Argentina.
Para Boca fue la quinta definición por penales al hilo que supera con Chiquito bajo los tres palos. Es 100% de eficacia. No es un detalle cuando todo el Pueblo Xeneize cuenta los días para la final del 4 de noviembre, ante Fluminense en el Maracaná, para conseguir la ansiada séptima Libertadores. Esta vez, su imagen fue suficiente y a Boca le alcanzó con el efecto Romero, quien después del juego charló con los medios presentes en la zona mixta del estadio Malvinas Argentinas.
Una llamativa confesión. “Les dije a mis compañeros que iba a hacer el esfuerzo de atajar uno o dos. No me sentía del todo bien hoy la verdad, estaba bastante caído, pero por suerte los muchachos de Talleres no embocaron al arco y eso también me ayudó a mí y a mis compañeros. que la verdad hicieron un gran trabajo desde los 12 pasos, la metieron todos”.
¿Si le tienen miedo los rivales? “No tengo ni idea, la verdad es que no lo sé. El segundo penal en el que me hacen el gol al ángulo, no tenía ni idea dónde pateaba. Decidí tirarme para la izquierda y el chico la pateó a la derecha y la clavó arriba, espectacular. Sí creo que le pegaron con muchísima violencia a los dos que se fueron alto. Pero esto es así, es un juego mental. Ellos no sabían cómo estaba yo y decidieron patear de esa manera”.
El análisis del partido de Boca en Mendoza. “Hicimos un gran trabajo, tendríamos que haber pasado en los 90 minutos. Pero bueno, tocó sufrir de vuelta e ir a los penales. Gracias a Dios, los muchachos la metieron todos y nos llevamos la clasificación que era lo que vinimos a buscar”.
“Siempre es importante seguir sumando, creo que en líneas generales, sumamos un montón. Grupalmente, en los 90 minutos hicimos un gran partido, en el primer tiempo merecimos más y en el segundo tuvimos muchísimas chances de gol, éste es el camino. Nos estamos dando cuenta que hay una sola manera de jugar al fútbol y es no rendirse, no entregarse y pelear, sacrificarse por el de al lado y estos muchachos están haciendo un gran trabajo últimamente”.
Para Chiquito, el DT encontró el equipo. “No sé si fue el mejor partido, pero sí un gran partido. Creo que el entrenador encontró el sistema que mejor se nos adapta. Creo que al juego que tenemos nosotros, que es tratar de jugar la pelota desde el fondo, sumarle dos delanteros aguerridos como los dos uruguayos y sumarle al Pipa (Benedetto) cuando le toca entrar, que aporta lo que tiene él para nosotros, la verdad que es importantísimo. El equipo se va sintiendo cada vez mejor y estamos en un buen camino. Se vienen cosas lindas, tenemos algo muy lindo por delante que es la final de la Libertadores. Nos metimos ahora en semifinales de la Copa Argentina y tenemos que levantar en el torneo local, que está faltando un poco, pero si logramos levantar y meternos entre los cuatro primeros, va a ser otro Boca que se van a encontrar. Gracias a Dios, las cosas están saliendo bien”.
El mérito de pasar ante un gran rival. Talleres es un gran rival que en los últimos años viene demostrando un gran fútbol. Ellos tenían un par de ausencias y nosotros también. Hicieron méritos suficientes y cuando estaban 1-0 a mí me tocó tapar una pelota abajo que si entraba, estábamos hablando de otra historia. Nos venimos sintiendo cada vez mejor y encontrando mejor adentro del campo de juego. Los recorridos de “Colo” Barco y de Medina son impresionantes. Son chicos creativos que entendieron que es fundamental correr y meter”.