El pueblo xeneize vive con mucha ansiedad las horas previas a la final de la Copa Libertadores de América, en la que Boca Juniors enfrentará a Fluminense en el mítico estadio Maracaná de Río de Janerio.
En ese contexto, una marea azul y oro transita las rutas y los cielos de Argentina con rumbo norte para llegar a la ciudad carioca y poder alentar al club de Juan Román Riquleme en su sueño de conquistar la séptima copa.
La migración de fanáticos ha dejado un sin número de escenas curiosas, desde hinchas que ruegan conseguir combustible hasta aquellos que fueron a pie para intentar conjurar el resultado final.
Pero uno de los hechos más llamativos, por no decir cuestionables, fue el que se produjo en un vuelo que tenía por destino final Río. En pleno viaje, los simpatizantes se levantaron de sus asientos y comenzaron a golpear el techo de la aeronave.
A tal punto llegó esta situación que terminaron por activar las máscaras de oxígeno debido a los impactos que recibió cada compartimento.
Afortunadamente, la situación no pasó a mayores y la aeronave llegó bien a destino.
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