Tras la pandemia de Covid-19 se hicieron más visibles los padecimientos en salud mental, especialmente entre las personas más jóvenes, de entre 15 y 18 años. En Mendoza, desde 2021 y lo que va del año, se observa un crecimiento en las internaciones y consultas en el orden de 30% con respecto a la prepandemia.
Desde Salud se informó que por este motivo se habilitaron más camas en los servicios de los hospitales en toda la provincia para chicos y jóvenes. También hubo un aumento de suicidios.
“La pandemia de Covid-19 dejará una huella imborrable en la salud mental de los niños y adolescentes”, advirtió el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) analizando el impacto del encierro y de la falta del contacto con pares y familiares, situaciones de incertidumbre propias de las restricciones para frenar los contagios en lo peor de la crisis sanitaria.
“Estamos volviendo a la apertura de camas en hospitales generales, es una estrategia puntual para contener a los chicos entre 15 y 18 años que no pueden ser asistidos en los hospitales pediátricos o de adultos y estamos formalizando esta acción para poderlos contener”, aseguró la ministra de Salud, Ana María Nadal, dando cuenta de las adecuaciones de los nosocomios generalistas a la Ley de Salud Mental, en los cuales ya hay 75 plazas, con servicios específicos para estos pacientes.
En el consultorio, niños y adolescentes presentan trastornos de ansiedad, en la conducta, autolesiones, ideario suicida, consumos problemáticos. Respecto del suicidio, si bien también se incrementó, por estrategia sanitaria -según alegaron- desde el área de Salud Mental no se brindó la estadística.
A través de una alerta temprana detectada en los centros de salud, o en la consulta del médico general, al tener el Ministerio de Salud una red de galenos de familia capacitados para ser los primeros en detectar estos padecimientos, se hacen las derivaciones a los distintos hospitales para los casos más complejos.
“La demanda aumentó muchísimo y tenemos que fortalecer los dispositivos. Hoy tenemos el Centro Integral Provincial de Atención de Urgencias del Adolescente (CIPAU) para la contención a la crisis y la emergencia con un equipo que contiene y atiende, pero necesitamos crear nuevos modos de intervención”, indicó Nadal.
La funcionaria hizo un repaso de un trabajo que viene de la gestión de la ex ministra Claudia Najul y que luego continuó Elizabeth Cresciteli con la dirección de Salud Mental, a cargo de la especialista Elizabeth Liberal.
“Lamentablemente tenemos indicadores de aumento del suicidio y estamos trabajando con la posvención que es asistir a las familias, luego de una pérdida de estas características para contener todo lo vincular, que está alrededor de la persona que se quitó la vida”, admitió la titular de la cartera de Salud.
La OPS llega Mendoza
Mendoza, junto con Neuquén, Santa Fe, Chaco y La Rioja fue elegida por la Organización Panamericana de la Salud para financiar proyectos en Salud Mental, en este caso las casas de medio camino, estadío intermedio entre la internación y la externación total. Liberal comentó que en noviembre llegará un equipo de la OPS para trabajar junto a la provincia en la creación de casas de medio camino y continuar con el acompañamiento que se hace a los pacientes con padecimientos mentales en la inserción laboral, en las casas asistidas cuando ya están de alta, centros de día, entre otros dispositivos para la recuperación y la inserción con la comunidad.
El hospital de Salud Mental Dr. Carlos Pereyra fue el primero en abrir estas residencias para la asistencia integral de personas que superaron una crisis o un brote y necesitan comenzar a vincularse nuevamente con su familia y con su vida diaria.
“Venimos haciendo un trabajo interministerial para que se pueda dar una integración real de las personas con padecimientos mentales. En las casas asistidas y en las casas de medio camino hay un abordaje de profesionales de salud, pero también de talleristas de artes plásticas, con espacios de radio para que esa recuperación sea lo más parecido a la vida que deben continuar y rompiendo con los viejos paradigmas del tratamiento de los enfermos, alejados de la sociedad”, recalcó. Hizo referencia a la política sanitaria de Mendoza en la adecuación de las camas de salud mental en los hospitales polivalentes, poniendo en valor el trabajo de todo el personal en momentos en los que también se peleaba cuerpo a cuerpo con el Covid-19.
La directora del hospital Dr. Pereyra, Sandra Kassis, reconoció que creció la demanda en el centro asistencial que dirige y que sólo en 2021 hubo 58.000 intervenciones entre consultas e internaciones, siendo más comunes los trastornos de ansiedad, padecimientos afectivos que pueden derivar en consumo de drogas o también “lo que se está viendo con mayor frecuencia es a jóvenes cada vez de menor edad que se autolesionan”.
El hospital es modelo en las residencias en las que continúan el tratamiento los pacientes, incluso el nosocomio cuenta con un predio de departamentos para asistir a las personas con esta problemática, “pero la gran demanda hace que se requieran más de estos dispositivos” y Salud deriva al efector privado lo que no puede absorber en el hospital El Sauce.
Sobre el suicidio, Liberal reconoció: “ya no es un tabú, es un tema que se trabaja y se pone sobre la mesa”. Y agregó: “cuando un adolescente o un niño se quita la vida, nos debemos preguntar qué nos está pasando como sociedad. Estamos trabajando articuladamente con la DGE (Dirección General de Escuelas) para estar atentos a las señales que se van presentando y fortaleciendo una red de apoyo, porque no se trata sólo de un problema sanitario, sino social”.