Por Victoria Navicelli. Contactala aquí.
Como toda postura de yoga, la cobra (también conocida en sánscrito como Bhujangasana), es una asana que busca lograr el equilibrio perfecto entre el mundo terrenal y el mundo espiritual. Es una máxima extensión de la columna, centro de la energía vital, y es ideal para estirar la zona de la musculatura abdominal.
Es una asana muy utilizada en toda clase de yoga y suele combinarse con la postura del niño o Balasana. Igualmente, es una postura de transición durante la práctica del Saludo al Sol.
Imaginá que simula ser una cobra, elevándose desde el suelo. De ahí la idea del mundo terrenal y el espiritual fusionando en un solo camino. Es muy útil para estirar la espalda y fortalecer los músculos de los brazos. ¡Vamos a la práctica!
Postura de la cobra, paso a paso
- Comenzamos tumbado en la manta, boca abajo. Pies y piernas juntas y rodillas bien estiradas.
- Apoyamos las palmas de las manos en el suelo, a los costados de los hombros. Los dedos firmes, apuntan hacia adelante. Frente apoyada en el suelo.
- Mientras inhalamos profundo despegamos la cabeza de la manta, primero la frente, la nariz, el mentón. Estirar la cabeza hasta sentir una ligera presión en la zona de la nuca.
- Con la fuerza abdominal, continuamos levantando el pecho.
- Cuando sintamos que el pecho está elevado, levantamos el tronco hasta estirar los brazos por completo.
- Permanecemos en la postura durante tres respiraciones abdominales completas.
- Inhalamos lento y exhalamos aún más lento. La mirada está dirigida al entrecejo.
- Una nueva inhalación y al espirar, descendemos lentamente manteniendo la mirada al frente y arriba.
- Bajamos paso a paso hasta volver a la postura inicial, tumbados boca abajo.
- Apoyamos lentamente abdomen, pecho, mentón, nariz y frente. Relajamos los brazos al costado del cuerpo y respiramos profundo.
Recomendaciones antes de hacer la postura de la cobra
- Evitar hacer pausas
- Lograr un movimiento fluido
- Tomar conciencia de la columna vertebral
- Llevar la mirada al punto indicado
- Mantener los muslos y las nalgas activas, es decir, tensionadas
- La respiración debe torácica y profunda
Beneficios de la postura de la cobra
- Brinda mayor flexibilidad a la columna
- Relaja y masajea a los órganos abdominales
- Fortalece la faja abdominal
- Mejora la circulación sanguínea
- Colabora a mantener una mayor serenidad, fuerza y confianza
Existen diferentes variantes de esta asana. Podés empezar a practicar la que aquí te comparto y, a medida que tomes fuerza y disciplina, podés trabajar tu cuerpo con las opciones que existen para profundizar la postura de la cobra.
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