Un avión de la aerolínea Ryanair protagonizó este jueves un nuevo incidente en el aeropuerto de Brindisi, al sur de Italia, cuando uno de sus motores se incendió mientras la aeronave se preparaba para despegar. A pesar del susto, ninguna persona resultó herida y los pasajeros fueron evacuados de manera segura.
El avión tenía como destino la ciudad de Turín y se encontraba en la pista preparando el despegue, cuando se detectó una llamarada en el motor derecho. Inmediatamente, se ordenó la evacuación de los 184 pasajeros y la tripulación a través de las rampas de emergencia.
“El aeropuerto de Salento tuvo que cerrar después de que un avión que salía tuvo un problema que requirió una evacuación de emergencia”, comentó un testigo. La terminal aérea fue cerrada temporalmente por pedido de las autoridades, aunque más tarde se informó la reanudación de sus operaciones.
Es el segundo incidente protagonizado en esta semana por una aeronave de esta compañía. El martes otro aparato procedente de Barcelona reventó los neumáticos de su tren de aterrizaje al llegar al aeropuerto de Bérgamo (norte). Para mayor tranquilidad, ningún imprevisto causó daños a los pasajeros.