El expresidente de Bolivia entre 2006 y 2019, Evo Morales, enfrenta una serie de investigaciones judiciales de gravedad: la supuesta violación de una menor y un caso de trata de personas que habría ocurrido hace ocho años, cuando aún ejercía la Presidencia.
Qué se sabe de la investigación contra Evo Morales por abuso y trata de personas
La controversia comenzó cuando Sandra Gutiérrez, una exfiscal de Tarija, afirmó haber sido despedida por intentar ejecutar una orden de captura en contra de Morales en un caso de trata de personas.
El exmandatario, según la denuncia, habría estado implicado entre 2014 y 2015 en la creación de una “guardia juvenil” denominada “Generación Evo”, con menores de edad, y en firmar en 2018 el acta de nacimiento de un bebé cuya madre tenía 16 años al momento del parto, lo que sugiere una relación inapropiada.
La denuncia también dice que los padres de la entonces menor se habrían “lucrado” para dejarla a disposición del expresidente.
El incidente detonó tensiones políticas dentro del partido gobernante MAS, liderado por Luis Arce, actual presidente de Bolivia.
Los seguidores de Morales afirman que las acusaciones son una estrategia para impedir su candidatura presidencial en las elecciones de 2025. Por su parte, varios ministros del Gobierno afirmaron que investigarán a Morales exhaustivamente ante las múltiples denuncias de “violaciones” y otros delitos del pasado.
Por otro lado, Juan Lanchipa, fiscal general de Bolivia, fue señalado de proteger a Morales al despedir a la fiscal Gutiérrez y desactivar la orden de captura.
La interna en el control de MAS: Morales vs. Arce
Este caso también se enmarca en la lucha interna por el control de MAS, donde Morales y Arce se disputan el liderazgo y la definición de la candidatura presidencial para 2025. El distanciamiento entre ambos se acentuó desde 2021, y Morales criticó abiertamente a varios ministros del actual gobierno, a quienes acusa de corrupción y vínculos con el narcotráfico. Las tensiones escalaron aún más tras una marcha liderada por Morales, denominada “Marcha para salvar Bolivia”, donde lanzó un ultimátum al presidente Arce.
El presidente Arce calificó este jueves de “sumamente delicado” el caso abierto contra el exmandatario Evo Morales por posible trata y tráfico de personas y anunció que pedirá que se declare “en reserva” para que no se politice y para proteger a la supuesta víctima.
Este no es el primer caso judicial que Morales enfrenta. En el pasado fue acusado de tráfico de influencias en un caso relacionado con su exnovia Gabriela Zapata, y también fue investigado por estupro durante el gobierno interino de Jeanine Áñez. Sin embargo, esos casos fueron cerrados justo tras el retorno del MAS al poder en 2020.
Argentina le quitó el estatus de refugiado a Evo Morales
En medio de estas investigaciones, el gobierno de Javier Milei le quitó a Evo Morales el estatus de refugiado que había recibido en 2019 por decisión de Alberto Fernández, luego de que abandonara Bolivia tras una crisis política que calificó como un “golpe de Estado”.
El Ministerio de Justicia de Mariano Cúneo Libarona informó en un comunicado “que cesó el estatus de refugiado otorgado al expresidente boliviano Juan Evo Morales Ayma”.
El Ejecutivo de Javier Milei alegó que ese estatus de refugiado lo utilizó “indebidamente como herramienta política, omitiendo el cumplimiento de los requisitos que establece” la ley argentina de reconocimiento y protección a los refugiados.
Morales fue recibido “con privilegios injustificados, pese a las graves acusaciones que pesaban sobre él, entre ellas corrupción, fraude electoral y persecución política de opositores”.
“Este Gobierno de ninguna manera utilizará los recursos de los argentinos para proteger a criminales, terroristas o intento de dictadores. No ayudamos a quienes siembran el terror y atentan contra la democracia”, señaló el Ministerio de Justicia.