“Hoy, las mujeres están seguras en Afganistán”, afirmó Akhund a la nación en un mensaje de audio retransmitido en la estatal Radio Televisión Afganistán (RTA). El primer ministro interino afirmó que las mujeres “tienen derecho a la educación y al trabajo” y que los talibanes asegurarán que el acceso a ambos “sea más sencillo para ellas y tengan acceso a los derechos básicos y legítimos”.
Los talibanes se hicieron con el control de Kabul el pasado 15 de agosto y, pese a las promesas de cambio, han anulado la participación de las mujeres en la vida pública. El Gobierno interino de los talibanes no cuenta actualmente con ninguna mujer, y ha sido denunciado por su falta de inclusividad al estar copado por miembros de la formación fundamentalista, pertenecientes a la mayoritaria etnia pastún y sin representación apenas de otras comunidades o sectores de la sociedad.
El régimen ha sido objeto de continuas críticas tanto dentro de Afganistán como de parte de la comunidad internacional por no permitir a las mujeres regresar a sus puestos de trabajo o a las estudiantes de secundaria volver a las escuelas, y han abolido el Ministerio de la Mujer. Akhund señaló que los talibanes buscan “buenas relaciones, incluyendo relaciones económicas, con otros países”, tras los intentos hasta ahora fallidos de los fundamentalistas por lograr el reconocimiento oficial de la comunidad internacional.
En su discurso, el mulá llamó también a la comunidad internacional a levantar las sanciones y descongelar los activos del país bloqueados en el exterior para hacer frente a la crisis humanitaria que atraviesa el país. Las declaraciones del primer ministro llegan mientras una delegación de los talibanes liderada por el ministro de Asuntos Exteriores afgano, Amir Khan Muttaqi, se encuentra en Catar para reunirse con delegaciones de Estados Unidos y de la Unión Europea (UE) entre hoy y el 29 de noviembre.