La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnes Callamard, sostuvo este miércoles que el “castigo colectivo” de la población civil en la Franja de Gaza por parte de Israel, que afecta a miles de niños, es “cruel e inhumano”, y advirtió que puede ser considerado como “crímenes de guerra”.
“Las autoridades israelíes deben restablecer inmediatamente el suministro eléctrico de Gaza y suspender las crecientes restricciones impuestas como resultado de la orden del Ministerio de Defensa del 9 de octubre de 2023 y levantar el bloqueo ilegal prolongado durante 16 años sobre la Franja de Gaza”, remarcó Callamard en un comunicado citado por la agencia de noticias Europa Press.
Agregó que Israel tiene, “como potencia ocupante”, la obligación con respecto al Derecho Internacional de “garantizar que se satisfagan las necesidades básicas de la población civil de Gaza”.
“El castigo colectivo de la población civil en la Franja de Gaza por parte de Israel es cruel e inhumano y pueden ser considerados crímenes de guerra”, expresó.
La ONG con sede en Londres alertó que el corte en el suministro eléctrico “exacerbará una catástrofe humanitaria ya en curso”, limitando las comunicaciones, impactando en otros servicios esenciales, como los servicios sanitarios, y poniendo en peligro la vida de pacientes hospitalizados, personas con enfermedades crónicas, en cuidados paliativos o recién nacidos.
AI salió así al cruce de los comentarios del ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, sobre el “asedio” a la Franja y recordó que “los civiles palestinos no son responsables de los crímenes de Hamas y otros grupos armados” de ese país.
Callamard, experta francesa en derechos humanos, expresó preocupación por los ataques contra el paso de Rafá y exigió a Israel que facilite el establecimiento de corredores humanitarios para la entrega de ayuda al enclave palestino, así como el paso seguro de heridos y civiles que deseen huir del conflicto armado, informó Télam.
Asimismo, informó que abrió una investigación contra los ataques aéreos israelíes en la Franja, especialmente un bombardeo contra un edificio residencial en el barrio de Al Zeitun en el que murieron 15 miembros de una misma familia, incluyendo siete niños.