Una persona perdió la vida y dos supuestos agresores fueron abatidos durante un ataque a un tribunal en Estambul, según informaron las autoridades turcas. El ministro del Interior, Ali Yerlikaya, detalló que el suceso ocurrió durante un “intento de asalto” al control de seguridad del tribunal de Caglayan alrededor de las 11:46 de la mañana.
Seis personas resultaron heridas en el hecho, incluyendo a tres agentes de policía. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, confirmó más tarde el fallecimiento de uno de los civiles heridos.
Caglayan, conocido también como el Palacio de Justicia de Estambul, es un enorme complejo judicial en el distrito de Kagithane, en el lado europeo de la ciudad. Cuenta con un amplio dispositivo de seguridad y múltiples entradas y, cuando se inauguró en 2011, era el centro judicial más grande de Europa.
Las imágenes publicadas por la agencia noticiosa estatal turca Anadolu mostraban cómo se abatió a los agresores en la explanada del edificio. Al parecer, dispararon contra la policía antes de ser derribados.
En otras imágenes se veía a gente resguardándose junto a un detector de metales en el interior del tribunal o corriendo para ponerse a cubierto. Los agentes ayudaron a un hombre que parecía herido en una pierna.
El ministro del Interior identificó a los atacantes como presuntos miembros del Partido Revolucionario de Liberación del Pueblo (DHKP-C), un grupo de extrema izquierda considerado una organización terrorista en Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea.
La fiscalía de Estambul inició una investigación sobre el incidente. El ataque tuvo lugar en el día en que Turquía conmemora el primer aniversario del terremoto que dejó más de 53,000 personas fallecidas en el sur del país.
El DHKP/C ha estado prácticamente inactivo en los últimos años. En marzo de 2015, el grupo tomó a un fiscal como rehén en el mismo tribunal y exigió detalles sobre el asesinato de un adolescente a manos de la policía durante protestas antigubernamentales el año anterior.
Dos pistoleros fallecieron cuando las autoridades allanaron el edificio y el fiscal murió más tarde a consecuencia de sus heridas.
En febrero de 2013, el grupo se atribuyó la responsabilidad por un ataque suicida en la embajada de Estados Unidos en Ankara en el que murió un guarda de seguridad turco y otras cuatro personas resultaron heridas.