Científicos descubrieron que muchos elefantes hembras han logrado evolucionar para nacer sin colmillos, en defensa a los cazadores furtivos que se concentran mayormente en regiones de África. La cacería de paquidermos para la venta de marfil en el mercado negro y los estragos de la guerra civil, son parte de los motivos que los investigadores toman en cuenta en cuanto al origen genético de esta condición.
Los expertos aseguran que el hecho de que algunos elefantes hembras estén naciendo sin sus icónicos colmillos blancos se debe a una implicación de dos genes asociados con el desarrollo de los dientes de los mamíferos. Uno de los cuales está conectado al cromosoma X y es letal para los machos, explicó en un informe Ryan Long, profesor asociado de la Universidad de Idaho de las ciencias de la vida silvestre, y sus colegas de la Universidad de Princeton, ElephantVoices y el Parque Nacional Gorongosa.
Esta nueva característica en los paquidermos es una respuesta evolutiva contra la caza desmedida de la especie, debido a que sus colmillos son apreciados en el multimillonario mercado negro de vida silvestre. Si bien hasta ahora no había evidencia genética directa que indicara cómo estaba sucediendo esto o por qué este rasgo ocurría exclusivamente en elefantes hembras, dijo Long, ahora la ciencia ha podido entenderlo.
Los expertos evaluaron entonces los impactos que tuvo la intensa caza furtiva de marfil, durante la Guerra Civil de Mozambique, en la evolución de los elefantes africanos y descubrieron que la frecuencia de ausencia de colmillos entre las hembras adultas después de la guerra fue significativamente creciente respecto a antes de la guerra, lo que sugiere una respuesta evolutiva ante la caza furtiva.
Para determinar este fenómeno, los investigadores tuvieron que recolectar datos de encuestas y muestras de sangre de elefantes en el Parque Nacional Gorongosa en Mozambique, para así confirmar su hipótesis de que el fenotipo sin colmillos se transmitía en el cromosoma X.
La investigación
Los estudios sobre genoma completo de los elefantes africanos implicó a dos genes candidatos con funciones conocidas en el desarrollo de los dientes de los mamíferos, incluida la formación de esmalte, dentina, cemento y periodonto.
Uno de estos, llamado AMELX, está asociado con un síndrome letal masculino dominante ligado al cromosoma X en humanos que disminuye el crecimiento de los colmillos laterales superiores, homólogos a los colmillos de elefante.
Por su parte, datos de la Universidad de Idaho señalan que dicho conflicto provocó una rápida disminución de la población de elefantes, de más 2.500 ejemplares a alrededor de 200, después de la guerra.
Fue entonces esa fuerte disminución la que trajo consigo un aumento en las elefantes hembras sin colmillos de entre el 18.5% al 50.9%. Caso contrario, no se han visto elefantes machos sin colmillos en el parque, pero ha habido raros avistamientos de ellos en otros lugares.