El Papa Francisco se encuentra en “buenas condiciones generales” tras ser operado anoche de una estenosis diverticular en el colon. Se trató de una intervención programada por lo que quedará una semana internado en el centro asistencial de Roma.
”Su Santidad el Papa Francisco se encuentra en buenas condiciones generales, despierto y respirando espontáneamente”, informó este lunes el vocero papal Matteo Bruni en un comunicado.
Bruni agregó que “la cirugía de estenosis diverticular realizada la noche del 4 de julio involucró una hemicolectomía izquierda y duró alrededor de tres horas”, con anestesia general, en referencia a una extirpación parcial del colon.
”Se espera una estancia hospitalaria de unos siete días, salvo complicaciones”, agregó Bruni.
Francisco “reaccionó bien a la intervención”, que fue hecha con anestesia general y conducida por el médico Sergio Alfieri. Así lo informó el Vaticano a través de un comunicado divulgado en las últimas horas del domingo y replicado por la agencia Télam.
La patología por la que fue operado el Papa alcanza a casi el 75% de las personas mayores de 80 años y en la mayoría de los casos de forma asintomática. Por otro lado, según médicos consultados por la prensa italiana, se agrava en verano.
A media mañana del lunes, el Vaticano no precisó aún detalles sobre la extirpación del colon y eventuales análisis posteriores.
Antes de la internación, Francisco había encabezado sin problemas el tradicional Ángelus desde el Palacio Apostólico y anunció su viaje de septiembre a Budapest y cuatro ciudades de Eslovaquia.
Tras la intervención, el Papa pasó la noche en la habitación que tiene disponible en el piso 10, la misma en la que, en 1981 el entonces Papa Juan Pablo II se recuperó del atentado sufrido en Plaza San Pedro.
Durante julio, el Papa tiene suspendidas las audiencias generales de los miércoles, como todos los veranos, y solo mantendrá los Ángelus dominicales.
Esta es la segunda operación a la que se somete el pontífice desde que fue elegido en 2013, luego de que en 2019 fuera operado de cataratas en el hospital Pio XI de la capital italiana.
La de este domingo fue además la primera vez que el Papa va al Gemelli, luego de que, el 27 de junio de 2014, se cancelara a última hora la visita que debía realizar al Hospital Universitario para celebrar la Misa con los enfermos y sus familiares por una indisposición inesperada.
Con 84 años entonces recién cumplidos, a fines de 2020 Francisco debió suspender su participación en la misa de fin de año por una “dolorosa ciática” que lo obligó a hacer reposo y por la que se lo vio con dificultades al caminar en algunas apariciones de este año, como durante algunos tramos del viaje que hizo a Irak en marzo.
Francisco designó a su actual médico personal, Renato Bernabei, a fines de febrero pasado, luego de la muerte de su anterior doctor, Fabrizio Soccorsi, por complicaciones en un cuadro de coronavirus.
Desde que se conoció la internación del Papa, numerosas figuras italianas y europeas enviaron sus saludos al pontífice, como el primer ministro de Italia Mario Draghi que hoy expresó “afectuosos deseos de pronta convalecencia y pronta recuperación al Santo Padre” a través del sitio web del Gobierno.