Un clásico que volvió para quedarse esta temporada es el corte de pelo “Mullet” caracterizado por ser corto por delante y largo en la zona de la nuca. Tuvo su auge y furor en los años 1980, antes de ser considerado la antítesis de la elegancia, sin embargo vuelve a estar de moda y arrasa en las estrellas internacionales.
Cantantes populares como Rihanna y Miley Cyrus, actrices como Úrsula Corberó y Scarlette Johannsen, así como un sorprendente número de jugadores de la selección inglesa de rugby, han contribuido a dar una nueva oportunidad a este corte, que consiste en dejarse la parte delantera muy corta, desde el flequillo hasta la parte superior del cráneo, y la de atrás, larga.
“Mis ídolos siempre fueron David Bowie y la princesa Diana de Gales, así que mi idea inicial fue parecerme al hijo que podrían haber tenido juntos”, explicó Sharon Daniels, una australiana de 26 años que vive en Brighton, en el sur de Inglaterra.
Sharon fue la segunda persona en lucir este corte en la ciudad. Lo sabía porque la gente le enviaba fotos del hombre en cuestión, pero lo que desconocía era que se estaba adelantando a la moda.
Hoy en día, el “mullet” está en todas partes. “No es que me encante la idea, porque ahora parece que busque fundirme entre la muchedumbre”, bromea.
Un regreso contra todo pronóstico
Para Tony Copeland, de la asociación de peluqueros British Master Barbers Alliance, el confinamiento fue determinante: la gente pudo probarlo en casa sin temer al “qué dirán”. “Cada vez, veremos más este año”, prevé.
Así, la competencia podría ser ardua en el próximo Festival del Corte Mullet, un concurso europeo cuya última edición tuvo lugar en Bélgica en 2019.
El vigente campeón, el francés Gauthier Istin, espera seguir ganando títulos. Para este agricultor, este corte es una filosofía, una forma de “afirmarse”: “Hay que tener confianza en si mismo para poder desacreditarse un poco delante de los demás. Y asumirlo completamente”, explica a la AFP.
Recuerda que este estilo se remonta a mucho antes de los años 1980: “Es interesante ver los mosaicos romanos: la gente llevaba el ‘mullet’ porque era mucho más simple que cualquier otro corte”, afirma Istin.
Según la cadena History, la primera mención en la literatura se remonta a la “Ilíada”, de Homero, en cuyas páginas los guerreros son descritos con “un flequillo y el pelo largo por detrás”.
Por otro lado, el corte de Benjamin Franklin, calvo en la parte superior del cráneo y con el pelo largo por detrás, fue considerado como una baza a la hora de convencer a los franceses de apoyar la revolución de Estados Unidos cuando era embajador en París, a finales del siglo XVIII.
En la época de las pelucas recargadas, este “look” transmitía “simplicidad e inocencia”, según “History”.
Pero el nombre inglés “mullet” empleado para definir este estilo no fue adoptado hasta 1994, gracias a una canción de los raperos estadounidenses Beastie Boys, “Mullethead”. En esa época, el corte ya vivía sus horas bajas, al asociarse con la vulgaridad y por ejemplo, en Estados Unidos, con las personas que vivían en caravanas al margen de la sociedad, en lugares recónditos del sur del país.
El “mullet” era entonces para “la gente que vivía perdida en el bosque sin enterarse de lo que pasaba”, explica Deirdre Novella, peluquera en Nueva York.
Según algunas teorías, el corte tenía al principio una función práctica: proteger la nuca del sol, a la vez que exigía pocos cuidados y ninguna destreza con las tijeras.
Pero los clientes que piden un corte “mullet” a Novella, en el barrio de Brooklyn, no tienen tan en cuenta estos factores. Se trata sobre todo de personas de las comunidades LGTB y de la artística “hardcore”.
Para llevarlo, “se necesita un estilo verdaderamente radical. Es para el tipo de personas que llevan prendas que no parecen bonitas, pero que están tan de moda que con ellas tienen un pase”, según la peluquera.