Las Vegas le dijo adiós al famoso hotel y casino Tropicana en una implosión organizada, que redujo a escombros el reconocido edificio. Las torres del hotel fueron derrumbadas antes del amanecer del miércoles en una celebración que incluyó un espectáculo de fuegos artificiales.
Esta fue la primera implosión en casi una década para esta ciudad que ya ha derrumbado otros casinos antes, para generar nuevos comienzos. Y como el espectáculo es indisociable de Las Vegas, la implosión mantuvo en vilo a visitantes y locales, aunque no pudo verse en áreas públicas.
El último casino que voló la ciudad fue en 2016, cuando la última torre del Riviera fue demolida para la expansión de un centro de convenciones. Esta vez el terreno será destinado a un centro deportivo, el estadio de béisbol de 1.500 millones de dólares para la reubicación de los Atléticos de Oakland. Es que la ciudad busca convertirse en un centro deportivo.
El Tropicana es el tercer casino más antiguo de la franja y cerró en abril luego de recibir huéspedes durante 67 años. Su pasado bajo la mafia lo convirtieron en un lugar tradicional de Las Vegas, con tres pisos construidos en 1957 y 300 habitaciones divididas en dos alas.
La historia de Tropicana no pasa desapercibida, sobre todo por los vínculos que tuvo con el crimen organizado, a través del mafioso Frank Costello.