El gobierno de Estados Unidos normalmente mantiene sus asuntos de inteligencia en estricta reserva, pero reveló en las últimas horas los detalles secretos de los planes militares de Rusia, con el fin de “prevenir” una invasión a Ucrania.
Desde que Rusia desplegó decenas de miles de tropas hacia la frontera con Ucrania en los meses recientes, Washington adoptó una estrategia poco convencional para que Moscú y el mundo se enteren de lo que sabe sobre los planes de invasión rusos, en lugar de mantenerlo en secreto.
”Finalmente, Washington está alcanzando a sus rivales -incluyendo a Rusia y WikiLeaks, en el uso de la información para perfilar eventos”, escribió Douglas London, antiguo oficial de la CIA, en la revista Foreign Affairs.
Con las tensiones creciendo, a comienzos de febrero funcionarios estadounidenses dijeron que Moscú planeaba montar un video con imágenes explícitas de un falso ataque ucraniano contra Rusia o contra rusos dentro de Ucrania, haciendo uso de imágenes de lugares destruidos, “cadáveres” de supuestas víctimas y hasta personas que actuarían como dolientes.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, es uno de varios funcionarios que detalló al pie de la letra el presunto plan.
”Hemos visto este tipo de actividad por parte de los rusos en el pasado y creemos que es importante que cuando lo veamos así como ahora lo podamos denunciar”, señaló.
Para diplomáticos estadounidenses y funcionarios de inteligencia y militares, su estrategia funciona aparentemente, haciendo pensar dos veces al presidente ruso Vladimir Putin sobre un supuesto plan que podría tener entre manos.
Días después, funcionarios estadounidenses entregaron a periodistas detalles acerca de los más de 100.000 militares concentrados en las fronteras de Ucrania, en los que describían la posible estrategia de Rusia de invadir, las bajas estimadas, y donde revelaban un mapa del plan muy específico con las rutas de invasión planeadas.
Este jueves, el secretario de Estado, Antony Blinken, proyectó que el escenario de una invasión podría llegar “en cuestión de días”, de acuerdo con los funcionarios.
”Primero, Rusia planea fabricar un pretexto para su ataque”, acusó Blinken en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. ”Esto podría ser un hecho violento que Rusia atribuya a Ucrania”, precisó.
”Podría ser un supuesto atentado terrorista con bombas dentro de Rusia, la invención de una fosa común, la escenificación de un ataque de dron contra civiles o un ataque falso o incluso real con armas químicas. Rusia describiría estos hechos como limpieza étnica o genocidio”, describió, refiriéndose a un reclamo hecho por Putin el martes.
Para el segundo paso, continuó, “los más altos mandos del gobierno ruso convocarían teatralmente reuniones de emergencia para atender la supuesta crisis. El gobierno emitiría declaraciones proclamando que Rusia deberá responder para defender a los ciudadanos rusos o a la etnia rusa en Ucrania”.
”Luego, se planea que comience el ataque”, concluyó.
Blinken también dijo que los disparos de obuses en el este de Ucrania en las últimas 48 horas forman parte de los esfuerzos de Rusia para crear “falsas provocaciones” que justifiquen una “agresión” a la exrepública soviética, dijo este viernes el secretario de Estado estadounidense.
Lo que ha ocurrido “en las últimas 24-48 horas es parte de un escenario que ya está instalado para crear falsas provocaciones, para luego tener que responder a esas provocaciones y al final iniciar una nueva agresión contra Ucrania”, afirmó Blinken en la conferencia sobre seguridad que se celebra en Múnich (sur de Alemania).
Funcionarios estadounidenses dicen que sus acusaciones sobre Rusia y Ucrania podrían probarse como erróneas, y admitieron que podrían ser criticados por ello. Pero, de hecho, ese es su deseo: que revelar los planes de Putin termine por disuadirlo de llevarlos a cabo.
”Es el mejor resultado posible. Salvaríamos miles de vidas”, remarcó un alto funcionario ante ese eventual escenario.