A más de 100 días de los ataques terroristas del 7 de cotubre sobre la población civil israelí, un nuevo video de propaganda de Hamás fue difundido en las últimas horas, mostrando a 3 de los 136 rehenes que aún permanecen secuestrados en Gaza.
La estrategia de comunicación del grupo, que cuenta con cuantiosos recursos económicos y gran alcance mediático irrestricto, comenzó en las primeras horas del lunes 15 de enero, cuando se dio a conocer la imagen de 3 rehenes: Noa Argamani, Yossi Sharabi e Itay Svirsky. Junto a sus imágenes, un texto rezaba: “Mañana informaremos sobre su destino”.
Posteriormente, en el video que comenzó a circurlar hace algunas horas, se ve a Noa, hija única de una mujer con cáncer terminal que ha hecho incontables pedidos para que organismos internacionales y de derechos humanos intervengan en la liberación de su hija, afirmando que Yossi e Itay murieron por causa de “bombardeos israelíes” mientras los terroristas los trasladaban de un lado al otro de la Franja, utilizándolos de escudos humanos. Al final del video original, se veían los cuerpos mutilados de los dos hombres, aunque no se ha determinado la fecha real en que las imágenes ni el video fueron tomados.
Mientras tanto, un nuevo atentado terrorista fue perpetrado en una parada de autobuses en Israel. Dos palestinos robaron autos y mientras uno se bajó a acuchillar a todos los civiles que esperaban el transporte para ir a trabajar, el otro salió a atropellar cuanta persona pudiera. El saldo del ataque fue de un muerto y 17 heridos.
La mujer apuñalada fue identificada como Edna Bluestein, de 79 años, mientras que hay otros tres heridos en grave estado. Hamás, pocos minutos después, se atribuyó la responsabilidad de los ataques y los celebró entre sus miembros. Los detenidos son Mahmoud Zidat, de 44 años, un trabajador ilegal de la ciudad palestina de Bani Naim en Cisjordania y su sobrino Ahmed Zidat, de 25 años, que estaba en el coche con su tío durante el ataque y luego huyó del lugar. Medios locales apuntan a que también apuñalaron a varias personas para robar los coches que usaron en el ataque múltiple.
A su vez, en Turquía, el futbolista israelí Sagiv Yekhezkel, fue detenido y expulsado luego del país por reclamar por la liberación de los rehenes. El escándalo, que fue rápidamente censurado por los medios locales, terminó en la deporación del futbolista que fue recibido con honores en Israel.
En Turquía, Hamás no es considerada una agrupación terrorista.