Partidarios y detractores de la nueva Constitución chilena se enfrentaron este domingo en el centro de Santiago. En este contexto, el gobierno denunció un ultraje a la bandera luego de que activistas travestis se pasaran la enseña por la cola.
Una marcha de ciclistas favorables a la carta magna llegó este mediodía a la plaza Italia, epicentro de las protestas desde octubre de 2019, y se cruzó con otra organizada por gente del campo, que a lomo de caballo y en carruajes expresaba su rechazo a la propuesta.
Allí, ambos grupos se enfrentaron a gritos, se lanzaron piedras e incluso algunos jinetes dieron latigazos a los ciclistas, según el diario local El Mercurio.
En tanto, la Subsecretaría de la Niñez informó en un comunicado que denunció ante la Fiscalía al grupo promotor de las diversidades sexuales y de género Las Indetectables por su actitud durante un acto favorable a la nueva Constitución, en Valparaíso.
Allí, una integrante de Las Indetectables simuló un aborto y extrajo de sus nalgas una bandera chilena que luego fue lanzada al público, donde había niños y adolescentes, según El Mercurio.
“Es absolutamente inaceptable la normalización de acciones que dañan de esta manera la convivencia intergeneracional y el respeto hacia la niñez y la adolescencia”, dijo la Subsecretaría de la Niñez en la nota.
Agregó que los espacios públicos “pertenecen a todos”, quienes “tienen el derecho a vivir en espacios libres de violencia, de actos ofensivos y degradantes, y a no ser perturbados en su desarrollo físico, mental, espiritual y moral”.
“Hemos denunciado ante la Fiscalía estos hechos y, en el marco de responsabilidad compartida, solicitamos a las autoridades locales y al Ministerio Público que investiguen responsabilidades, y a los tribunales, que sancionen estos actos”, subrayó el documento.
“Estos hechos no solo ofenden a nuestros símbolos patrios, sino que atentan contra niños, niñas y adolescentes”, afirmó por su parte la ministra vocera del gobierno, Camila Vallejo.
Para la funcionaria, el incidente fue “un hecho totalmente repudiable, inaceptable, escandaloso”. “Creo que todo tiene un límite, y es que el espacio público tenemos que resguardarlo, y eso significa respetar a todos quienes lo habitan”, remarcó Vallejo.
