Medios italianos señalaron que actualmente no hay acuerdos sobre una posible reunión entre el presidente ruso Vladimir Putin y el Papa Francisco. Estas iniciativas, según el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, “pasan por los servicios diplomáticos”, y de momento “no hay acuerdos sobre los encuentros”.
En una entrevista con Corriere Della Sera, Francisco había expresado su voluntad de reunirse con Putin en Moscú a fin de discutir un posible acuerdo sobre el conflicto en Ucrania. “Le pedí al cardenal Pietro Parolin, después de veinte días de guerra, que le enviara a Putin el mensaje de que estaba dispuesto a ir a Moscú”, dijo el Pontífice. “Todavía -continúa- no hemos recibido respuesta y seguimos insistiendo, aunque me temo que Putin no puede y no quiere tener esta reunión ahora mismo”.
En esa misma entrevista, el Papa Francisco instó al Patriarca Kirill a desempeñar un papel de promotor de la paz, y recordó una conversación “que duró 40 minutos, vía Zoom”, en la que Kirill, en cambio, le había explicado extensamente a Bergoglio las razones, según Moscú, de la guerra.
“Hablé con Kirill durante 40 minutos. Los primeros veinte, con tarjeta en mano, me leyó todas las justificaciones de la guerra. Escuché y le dije: no entiendo nada de esto. Hermano, no somos clérigos de estado, no podemos usar el lenguaje de la política, sino el de Jesús, somos pastores del mismo pueblo santo de Dios, para ello debemos buscar caminos de paz, para poner fin a los disparos de armas El Patriarca no puede transformarse en monaguillo de Putin”, había afirmado el Papa.
Sin embargo, según la Iglesia Ortodoxa, Francisco supuestamente “tergiversó su conversación” y usó “un tono equivocado” al informarla: “Es poco probable que las declaraciones del Papa contribuyan al establecimiento de un diálogo constructivo entre los católicos romanos y los cristianos“, dijo el Patriarcado de Moscú en una nota.
Por otro lado, ambos jerarcas, según Francisco, coincidieron en que había que aplazar la reunión entre ambos programada para el 14 de junio en Jerusalén, porque “podría dar una señal ambigua”.
La Iglesia rusa subrayó que Kiril le explicó a Francisco que el conflicto en Ucrania no comenzó ahora, sino en 2014, con el cambio de poder en Kiev después de la revolución del Maidán.
El jerarca de la IOR también recordó que Rusia había recibido hace décadas promesas de la OTAN de que no iba a expandirse al este, algo que no se cumplió.
Kiril también aseguró que la situación actual en Ucrania le causa “un gran dolor” porque la Iglesia rusa tiene fieles a ambos lados de la frontera.
Por ello, preguntó al Papa cómo ambas Iglesias pueden “influir en el estado de cosas”, según el comunicado de la IOR.
“¿Cómo podemos contribuir a la pacificación de los beligerantes con el único objetivo de lograr el fortalecimiento de la paz y de la justicia? Es muy importante en las condiciones actuales evitar una mayor escalada”, dijo el patriarca ruso a Francisco, según la nota.