Dos soldados decidieran casarse con sus parejas en medio de la guerra entre Rusia y Ucrania. “Doble boda de los paracaidistas ucranianos de la 25ª Brigada en la zona cercana al frente. Olha+Vladyslav=💙 Khrystyna+Mykola=💛”, escribió el ministerio de defensa ucraniano y junto al texto postearon imágenes de las parejas.
Esta es otra de las historias que día a día se mezclan en medio del conflicto internacional. Como el caso de un padre y su hijo que con la ayuda de un dron brindaron información de importancia al ejército de ese país.
Mientras los tanques y camiones rusos se acercaban a su pueblo, un adolescente ucraniano y su padre lanzaron su pequeño dron al aire. Trabajando en equipo, tomaron fotos de la columna de vehículos blindados que se acercaba a Kiev y señalaron sus coordenadas, enviando rápidamente la valiosa información a los militares ucranianos.
En pocos minutos, las baterías de artillería lanzaron una lluvia de proyectiles sobre las fuerzas invasoras, con un efecto mortal.
Andriy Pokrasa, de 15 años, y su padre, Stanislav, fueron aclamados en Ucrania por su labor de reconocimiento aéreo voluntario en los primeros días de la invasión, cuando las tropas rusas que se dirigían desde el norte intentaron, sin éxito, tomar la capital. Durante toda una semana después de la invasión del 24 de febrero, la pareja realizó repetidas salidas con su dron, arriesgándose a ser capturados o a algo peor si las tropas rusas se hubieran enterado de su espionaje.
“Fueron algunos de los momentos más aterradores de mi vida”, relató Andriy mientras demostraba sus habilidades de pilotaje a un equipo de periodistas de The Associated Press. “Proporcionamos las fotos y la ubicación a las fuerzas armadas”, dijo. “Acotaron las coordenadas con mayor precisión y las transmitieron por walkie-talkie, para ajustar la artillería”.
Su padre se alegraba de dejar la labor en manos del joven. “Yo puedo manejar el dron, pero mi hijo lo hace mucho mejor. Inmediatamente decidimos que lo hiciera él’', dijo Stanislav Pokrasa, de 41 años.
