El Papa Francisco llegó el viernes a su casa de Santa Marta después de nueve noches de internación y, según indicaron, seguirá su postoperatorio en el Vaticano. Había sido internado el pasado 7 de junio porque desde hacía meses tenía dolores recurrentes, cada vez más intensos. Le realizaron una laparotomía con plástica, por una hernia que se le había formado en la cicatriz de una vieja operación realizada en Argentina en 1980.
Bergoglio no está dispuesto a renunciar y dejar de lado sus costumbres habituales. Ayer, al dejar el hospital, no volvió directo al Vaticano, se detuvo e hizo una parada para rezar en la Basílica Santa Maria Maggiore, donde se dirigió al pueblo argentino en exclusiva a través de las cámaras de C5N: “recen con mi”, pidió en referencia a su salud.
Según Ámbito, la intervención que atravesó fue delicada, aunque el médico que lo operó, Sergio Alfieri, reiteró que “le pedimos que haga un poco de reposo y estoy seguro que esta vez nos va a escuchar porque tiene compromisos importantes”. Y en referencia a los próximos viajes especificó: “los podrá afrontar porque está mejor que antes, no tiene más los malestares que tenía: será un Papa más fuerte que antes”.
Los médicos le pidieron a Bergoglio que reduzca al mínimo los esfuerzos. Le han implantado una malla protésica en la pared del abdomen y se debe cicatrizar. Tres meses, le dijeron, porque si se rompe se debe nuevamente intervenir quirúrgicamente.
Los próximo viajes apostólicos de Francisco
Francisco tiene programados dos viajes importantes en agosto que ya confirmó que los hará. Del 2 al 6 en Lisboa, Portugal y a fin del mismo mes en Mongolia.
El médico Alfieri ya dijo que si realiza un cuidadoso y atento reposo “podrá hacerlos en mejores condiciones que antes”. Y hablando de la salud general de Bergoglio agregó que “tiene el corazón perfecto, la cabeza de uno de cincuenta y los exámenes de sangre para envidiar”.
Estará en el Ángelus de este domingo
De acuerdo con Ámbito, mañana domingo recitará el Ángelus en la Plaza San Pedro. El miércoles, en cambio, fue anulada la audiencia general para evitar tantos esfuerzos en su recuperación.
El martes recibirá en audiencia al presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel y el miércoles 21 al de Brasil, Ignacio Lula Da Silva. Ambos encuentros son importantes porque se vislumbran como posibles interlocutores en su “misión de paz” para abrir un canal de diálogo entre Rusia y Ucrania.
Se espera que la próxima semana también se reúna con el cardenal italiano, Matteo Zuppi, para que le informe sobre el viaje que realizó a Ucrania y los detalles del encuentro con el presidente Zelensky. Ahora planificarán la segunda etapa, el viaje que tendrá que realizar Zuppi a Moscú a pedido de Francisco.