El gobierno de Ucrania informó que un solado debió ser sometido a una peligrosa cirugía para extraer de su pecho una granada. El artefacto quedó alojado en el cuerpo del hombre durante un combate en la guerra y había riesgo de que estallara.
La viceministra de Defensa, Hanna Maliar, dio detalles de la peligrosísima intervención a través de sus redes sociales. “No todas las heridas en la zona del corazón son letales”, explicó.
Maliar dijo que la granada fue extraída bajo la supervisión de dos militares expertos en explosivos para tratar de asegurar la seguridad de los médicos y dar indicaciones para evitar que fuera detonada. El cirujano a cargo de la intervención fue Andry Verba, uno de los doctores más experimentados del ejercito ucraniano.
Según informó la BBC, durante la operación no se pudo utilizar la electrocoagulación, procedimiento común en las cirugías del corazón para evitar que el paciente sufra una hemorragia. Ocurre que existía el riesgo que la corriente eléctrica pudiera detonar la bomba.
“La parte sin explotar de la granada fue extraída de debajo del corazón. La granada no explotó, pero siguió siendo explosiva”, afirmó por su parte Anton Gerashchenko, asesor ministerial de Asuntos Internos de Ucrania.
“El procedimiento se incluirá en los manuales de medicina. Nunca se habían realizado tales operaciones en la práctica de nuestros médicos. Algo similar a lo que ocurrió durante la guerra en Afganistán”, agregó.
Al ser consultado por el paciente, Gerashchenko dijo: “solo puedo decir que nació en 1994, que su condición es estable y que ahora ha sido enviado a rehabilitación. Este caso pasará a la historia de la medicina”.