Antes de exponer sus propuestas a los cerca de 320 periodistas que acudieron a escucharle, Emmanuel Macron, cuyo mandato se ha constantemente visto sacudido por las crisis: los chalecos amarillos, las manifestaciones relacionadas con la reforma de las pensiones, el Covid-19, y recientemente la guerra en Ucrania, precisó que su plan para Francia se basa en una convicción que justamente se desprende de todo ello: intentar que su país sea “una nación más independiente en una Europa más fuerte”.
Defensa: En el ámbito de la defensa, Emmanuel Macron afirmó que su proyecto llegaba en un momento en que la “tragedia” volvía a la “historia”, en alusión a la ofensiva rusa contra Ucrania. El presidente francés dijo que quería más independencia para su país, lo que, según él, podría conseguirse con más inversión en el gasto militar. Por ello, el presupuesto del ejército será aumentado hasta alcanzar los 50.000 millones de euros de aquí a 2025; prestando “atención a las capacidades del país frente a los conflictos híbridos y a una guerra de alta intensidad que podría volver al continente”.
Agricultura e Industria: Además de la independencia en cuanto a las capacidades de defensa del país, el jefe de Estado francés habló también de la “independencia agrícola, industrial y creativa”. Macron dijo que quería hacer de la renovación de las generaciones en el sector agrícola una prioridad, a través de la formación y sobre todo del apoyo a los jóvenes agricultores. Además, anunció que 30.000 millones de euros serán invertidos en los “sectores industriales del futuro”.
Independencia energética: La independencia que Macron dice buscar para incrementar la soberanía de Francia, debe conseguirse también, según él, a nivel energético. El país está comprometido con una estrategia de neutralidad de carbono para 2050, que el jefe de Estado dice querer llevar a cabo. En cuanto a los proyectos relacionados con la producción de energía, Macron presentó varios objetivos de aquí a 2050: Francia se comprometerá a la construcción de seis reactores nucleares y un estudio inmediato de otros ocho reactores. La energía solar se multiplicará por diez y se construirán 50 parques eólicos en el mar.
Empleo y Reforma de las pensiones: Animado por la caída del desempleo desde 2017, el presidente saliente también anunció que aspiraría al pleno empleo durante los próximos cinco años. Macron también planea aumentar gradualmente la edad de jubilación hasta los 65 años, pero señaló que esta reforma tendría en cuenta las largas carreras, los problemas de discapacidad y la realidad de las profesiones. En una carta en la que anunciaba su candidatura, Emmanuel Macron ya había manifestado su deseo de que los franceses “trabajen más”. Este aplazamiento de la edad legal de jubilación sería una de las reformas prioritarias de su próximo mandato de cinco años, si es reelegido. Actualmente, en Francia, la edad de jubilación es de 62 años.
Educación: El jefe de Estado francés también quiere aumentar la autonomía de las universidades y las escuelas. El 10 de agosto de 2007, el entonces gobierno francés promulgó una ley sobre las libertades y responsabilidades de las universidades para transferir progresivamente a las universidades el control de sus presupuestos y recursos humanos, que hasta entonces era responsabilidad del Estado. Pero desde los primeros años surgieron dificultades, ya que algunas instituciones presentaban déficits. Los críticos de la autonomía de las estructuras educativas también denuncian una ley de concepción liberal y la desvinculación del Estado.
Salud: Macron añadió que, además de la educación, la salud será para su Gobierno, un área de trabajo importante si es reelegido. El mandatario planea “reforzar la política de prevención, simplificar la gobernanza de los hospitales y mejorar el acceso a la atención de urgencia”.
Política migratoria: En el programa del presidente-candidato, también figura la aplicación de una política de asilo más restrictiva. Macron ha declarado que cualquier solicitante de asilo estará obligado a abandonar el país inmediatamente si su solicitud es rechazada por Francia.
El debate sobre la eutanasia El candidato anunció que, si los franceses lo eligen presidente, crearía una convención de ciudadanos para resolver el debate sobre el “final de la vida”, con también un referéndum sobre lo que recomendará esta convención.