Un devastador incendio arrasó un albergue de vacaciones destinado a personas con discapacidad en la localidad de Wintzenheim, en el noreste de Francia, dejando un sombrío saldo de nueve muertos y se temía que otras dos hubieran desaparecido, según las autoridades locales.
El secretario general de la prefectura de Alto Rin, Christophe Marot, confirmó que las mismas estaban presentes en el albergue en el momento del incendio y no lograron escapar. “No hay muchas dudas”, enfatizó Marot, sobre la trágica suerte de las víctimas.
“Localizamos nueve cuerpos y buscamos aún a dos”, declaró a la AFP el teniente coronel del servicio de bomberos Philippe Hauwiller, al mando de la operación de rescate. Drones, perros y socorristas localizaron los cuerpos, precisó.
A pesar de la rápida respuesta de los bomberos, quienes fueron alertados alrededor de las 6:30 AM hora local, las llamas consumieron el albergue de manera veloz. La prefectura informó que diecisiete personas lograron ser evacuadas, aunque una de ellas fue trasladada al hospital en estado de emergencia relativa y otra se encontraba en shock.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, utilizó la plataforma de redes sociales X -anteriormente conocida como Twitter- para anunciar que se dirigirá al lugar de la tragedia en busca de respuestas y apoyo a las familias afectadas.
El albergue, que había sido alquilado por una asociación francesa de ayuda a personas con discapacidad, se encontraba en una histórica granja renovada, abarcando una superficie de 500 m² distribuidos en dos plantas y una buhardilla, según información proporcionada por los equipos de bomberos.
El incendio se originó en la planta baja, y aunque las llamas fueron controladas con rapidez, la magnitud de la devastación dejó a nueve personas sin vida. Las autoridades están trabajando arduamente para confirmar oficialmente la identidad de las víctimas, mientras la comunidad local y el país entero lamentan esta triste y trágica pérdida.