El Tribunal General de la Unión Europea (UE) mantuvo firme hoy una multa superior a 2.400 millones de euros contra Google, por abuso de posición dominante en sus servicios online de comparación de precios. Ese Tribunal rechazó una apelación presentada por el gigante tecnológico a la sanción que le había sido aplicada por la autoridad antimonopolio de la Comisión Europea (CE) en 2017, y que en su momento constituía un monto sin precedentes en el bloque.
“La sentencia de hoy envía el mensaje claro de que la conducta de Google fue ilegal y proporciona la claridad jurídica necesaria para el mercado”, señaló la portavoz de competencia de la Comisión, Arianna Podesta, tras el fallo del tribunal, que se puede disputar aún ante el máximo órgano judicial comunitario, el Tribunal de Justicia de la UE.
El caso estaba centrado en el mecanismo de comparación de precios de Google, en el que favorecía su propia herramienta -Google Shopping- sobre otras firmas en la presentación de los resultados, violando de esa forma la normativa europea sobre competencia, precisó la agencia de noticias AFP. Así, el Tribunal General reconoció la “naturaleza anticompetitiva” de esa práctica, consideró que producía “efectos dañinos” en el mercado y rechazó los argumentos de Google para justificar su conducta.
La apelación a la multa había sido presentada por Google y una empresa asociada, Alphabet. Sin embargo, el Tribunal informó que descartó “la mayor parte de la acción presentada por las dos empresas, y mantiene la multa impuesta por la Comisión (Europea)”. Por su parte, un portavoz de la división europea de Google apuntó en un escueto comunicado que “revisaría cuidadosamente” el fallo.
Ante esta determinación, Google tiene ahora por delante únicamente una apelación a la máxima corte europea, el Tribunal de Justicia de la UE, también con sede en Luxemburgo.