El primer ministro haitiano, Ariel Henry, aceptó a última hora del lunes dimitir de su cargo, anunció el presidente actual de la Comunidad del Caribe (Caricom) en una rueda de prensa tras una reunión en Jamaica sobre el país, asolado por la violencia de las pandillas y una crisis de gobernabilidad.
Henry dimitirá tras “el establecimiento de un consejo presidencial de transición y el nombramiento de un primer ministro interino”, anunció el presidente de turno de la Comunidad del Caribe y líder de Guyana, Irfaan Ali.
La decisión fue adoptada tras una reunión en Jamaica con representantes de otros socios internacionales como Estados Unidos y Francia, así como de la ONU. Henry no asistió al encuentro, permaneciendo en Puerto Rico, donde lleva una semana varado ante la escalada de la violencia en Haití y las presiones para que renunciara.
“Nos complace anunciar el compromiso con un acuerdo de gobernanza de transición que allane el camino para una transición pacífica del poder, la continuidad de la gobernanza y un plan de acción para la seguridad a corto plazo y la ruta hacia unas elecciones libres y justas”, declaró a agencias en las últimas horas.
El cuestionado dirigente haitiano, varado en Puerto Rico mientras su país sufre la violencia de las pandillas, será bienvenido si decide quedarse en ese territorio estadounidense del Caribe, afirmaron desde el gobierno de EE.UU. Henry es libre de permanecer donde se encuentre en el territorio estadounidense de Puerto Rico o viajar a otro lugar.
Aunque Henry ha expresado que quiere regresar a su país, también ha dicho que la situación de seguridad deberá mejorar en Haití para que se sienta cómodo haciéndolo. Casi en paralelo, la Comunidad del Caribe (Caricom) y Estados Unidos insistieron en la necesidad de acelerar una transición política en Haití y de desplegar una fuerza multinacional, a la que Washington comprometió 100 millones de dólares adicionales.
Este lunes el área metropolitana de Puerto Príncipe lucía en calma, pero se produjeron nuevas amenazas de la coalición de bandas armadas Vivre Ensemble (Vivir Juntos), que rechazó las negociaciones de la comunidad internacional para encontrar una salida a la grave crisis que sacude el país.