Un equipo de arqueólogos alemanes descubrió a partir de la utilización de rayos láser, restos de una civilización que había desarrollado avanzadas técnicas de agricultura y de gestión del agua, en el Amazonas boliviano.
Se trata de científicos del Instituto Arqueológico alemán de Bonn, quienes publicaron los resultados de su investigación en la revista Nature.
En su artículo, relataron que hallaron un yacimiento inmenso debajo de la densidad de la selva, por lo que creen que se trató de una ciudad entera.
La arquitectura cívica y ceremonial de los asentamientos incluía andenes escalonados, que en su cima tenía estructuras con forma de U, montículos, andenes rectangulares y pirámides cónicas, que alcanzaban los 22 metros de altura.
Según los investigadores, se trata de “los Casarabe”, un pueblo que hasta donde se sabe, habitó la zona hasta hace al menos 1400 años. El equipo alemán lanzó varios láseres desde distintos helicópteros para documentar el yacimiento y así poder proceder a un análisis.
Los arqueólogos consideraron que esta civilización pudo haber sido bastante numerosa durante su apogeo, una teoría que derriba varias de las preconcepciones sostenidas hasta ahora. En efecto, no había registro de asentamientos en la Amazonía boliviana antes de la llegada de los españoles, según consignó National Geographic.
La investigación determinó que la civilización se adaptó rápidamente al entorno en el que residían y desarrollaron un extenso complejo urbanístico en medio de la selva. El equipo alemán destacó que los datos parten de sitios hallados en el mosaico de sabana-bosque de los Llanos de Mojos, en el suroeste del Amazonas.
Los Casarabe, vivieron entre los años 500 y 1400, y se expandieron a lo largo de 4500 kilómetros cuadrados. Una de las particularidades que apareció en el estudio es que el pueblo logró un desarrollo urbano no invasivo con el medioambiente. El yacimiento contiene andenes escalonados e infraestructura para la gestión del agua.
Los arqueólogos señalaron que los asentamientos descubiertos están rodeados por “bancos poligonales concéntricos clasificados”. Según expusieron, “representan nodos centrales que están conectados a sitios de menor rango por calzadas rectas y elevadas que se extienden a lo largo de varios kilómetros”. No existen datos de sitios tan complejos descritos así en aquel período.
