Un inusual episodio se vivió en las costas de la comuna de Concón, en la región de Valparaíso (Chile), donde los residentes avistaron un animal que no suele estar tan cerca de la playa: una ballena franca austral. Y no estaba sola, sino que la acompañaba su cría.
El hecho sucedió el pasado sábado en un sector de las playas de Concón, cerca de Viña del Mar, donde Benjamín Valenzuela Wallis (@benjavalenzuelawallis en TikTok) grabó con su dron la llegada de estos dos cetáceos.
“Hoy nuevamente este maravilloso cetáceo pasó por las costas de Concón, en la playa La Boca. Hace 2 años tuve la fortuna de realizar algo similar. Espero que puedan disfrutar del video y tengan un buen fin de semana”, dijo en su video publicado en la red social, donde ya acumuló más de 1,6 millones de visualizaciones y 165 mil likes.
La ballena franca austral (Eubalaena australis) es una de las especies más emblemáticas y se encuentra principalmente en los océanos del hemisferio sur. En Argentina y Chile suele verse en la zona patagónica. Es conocida por su tamaño imponente (entre 10 y 20 metros, con hasta 45 toneladas de peso) y su comportamiento amigable.
Su cuerpo es mayormente negro con algunas manchas blancas en el abdomen y otras áreas. Tiene una serie de callosidades rugosas en la cabeza, especialmente alrededor del rostro, que son únicas para cada individuo, como huellas dactilares.
Las ballenas francas australes migran largas distancias entre sus áreas de alimentación en las regiones polares y sus áreas de reproducción en aguas más cálidas.
Por qué llegó la ballena a la playa de Concón
Juan Höfer, académico de la Escuela de Ciencias del Mar de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, dijo al medio chileno Mega Noticias que “la población no es muy abundante y por lo general no están tan cerca de la costa, a excepción de este caso” en Concón, donde su aparición llamó tanto la atención.
Höfer también aseguró que esto que puede ser una buena señal. “Podría indicarnos que (la ballena) se ha reproducido hace no tanto tiempo y que quizás la población está recuperándose muy lentamente, pero es muy pronto para determinarlo como tal”, declaró..
“Durante los meses de verano, desde noviembre hasta marzo, baja a las aguas Antárticas para alimentarse, aprovechando la gran concentración de krill”, concluyó sobre el proceso natural de la especie.
Seguí leyendo:
