En el barrio de Cortes, en Burgos, España, una vecina hizo un hallazgo sorprendente mientras revisaba cajas de ropa almacenadas en su desván. La mujer descubrió un proyectil tipo granada, lo que llevó a la intervención de las autoridades locales para garantizar la seguridad de los residentes.
La Policía Nacional acudió rápidamente al lugar tras recibir la alerta de la dueña de la vivienda. En respuesta al posible peligro, se activó el protocolo de emergencia y se solicitó la asistencia de los Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX), quienes se desplazaron desde la Jefatura Superior en Valladolid para examinar el artefacto.
El proyectil, que medía aproximadamente 50 centímetros de longitud, fue inspeccionado minuciosamente por los especialistas. Afortunadamente, se determinó que el artefacto estaba vacío y carecía de cualquier carga explosiva o mecanismo de detonación, eliminando cualquier riesgo para la seguridad pública.
La mujer que encontró el artefacto explicó a las autoridades que el mismo, posiblemente, haya estado guardado en el desván desde que su difunto esposo, que lo había recibido durante su servicio militar, lo almacenó junto con otras pertenencias.
El artefacto fue retirado y trasladado a las dependencias policiales para su destrucción segura.