Este lunes, el féretro de Isabel II, la reina más longeva del Reino Unido, recorrió un camino que fue desde el Palacio de Holyrood hasta la catedral de San Gil en Edimburgo, Escocia. Durante el recorrido, el coche fúnebre fue acompañado por el rey Carlos III y Camilla, la reina consorte. Pero además se encontraban otros miembros de la Familia Real, entre quienes se encontraba el príncipe Andrés, el tercer hijo de Isabel.
La figura de Andrés ha estado envuelta en escándalos, ya que se lo relaciona con el caso de abusos sexuales que condenó a Jeffrey Epstein. El príncipe le puso punto final a esta polémica con un acuerdo. Sin embargo, es debido a este asunto que fue increpado durante este viaje de despedida a su madre.
Como puede observarse en la emisión en vivo del acto, uno de los participantes del público que se encontraba tras las vallas, abucheó al príncipe Andrés y lo insultó en medio del silencio que reinaba las calles debido al cortejo fúnebre.
“¡Andrés, eres un viejo enfermo!” le gritó el joven al duque de 62 años, mientras este pasaba detrás del coche fúnebre de su madre. Apenas unos segundos después, otro de los presentes empujó al manifestante y comenzó una pequeña pelea entre el público. Fue ahí cuando intervino la guardia y el joven fue reducido mientras seguía gritando “asqueroso” y “no he hecho nada malo”.
Mientras tanto, los demás asistentes empezaron a vitorear “Dios salve al rey”.
Según información difundida en diversos medios internacionales, la policía escocesa lanzó un informe en el que afirmaba que un hombre de 22 años había sido detenido “en relación con una alteración del orden público en la Milla Real”.
Los restos de la reina permanecerán en Edimburgo durante 24 horas. Estarán en una sala abierta para que la población pueda rendirle honores a la monarca antes de partir a Londres, lugar en el que miércoles se dará comienzo al velatorio oficial en la Abadía de Westminster.
La situación del príncipe Andrés
En medio de la polémica en torno al caso de Jeffrey Epstein, Andrés fue retirado de la vida pública. Además, para la ocasión de hoy no se le permitió usar ropa militar sino en su lugar tuvo que usar un traje negro.
En el resto de los eventos públicos en torno a los honores a su madre, la reina Isabel II, el príncipe deberá aparecer vestido de civil. Habrá, sin embargo, una única excepción como muestra especial de respeto por la figura de la monarca en la vigilia final en Westminster Hall, según informó la prensa inglesa.