El parlamento iraní aprobó este domingo un proyecto de ley sobre la adhesión del país a la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) tras el informe favorable de la Comisión de Política Exterior y Seguridad Nacional. Los representantes del Consejo Islámico aprobaron la entrada en la OCS por mayoría de votos, luego que 205 diputados votaron a favor de la aprobación del proyecto de ley.
Teherán recibió el estatus de observador en la OCS en 2005, después de lo cual solicitó la membresía de pleno derecho en 2008. Sin embargo hasta 2015, no pudo acceder a Irán a la organización debido a las sanciones internacionales aplicadas contra Teherán. De acuerdo con las reglas de la OCS, un país bajo las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU no puede convertirse en miembro. Las sanciones se levantaron en 2015 cuando Teherán acordó limitar su programa nuclear en el marco de un acuerdo internacional.
Sin embargo, cuando las sanciones dejaron de ser un obstáculo para la admisión de Irán en la organización, Tayikistán bloqueó la solicitud de Irán, tras acusarlo de apoyar al Partido del Renacimiento Islámico de Tayikistán y de participar indirectamente en la organización de actos terroristas cometidos a fines de la década de 1990 en el territorio del país. El conflicto se resolvió cuando el presidente iraní, Ebrahim Raisi, voló a Dushanbe para asistir a la cumbre del aniversario de la OCS en 2021, donde sus líderes aprobaron la admisión de Irán como miembro de pleno derecho de la organización.
El 15 de septiembre de 2022, Irán firmó un memorando de compromisos en la Organización de Cooperación de Shanghai. “Los futuros documentos obligatorios de la organización también serán considerados por el Parlamento de conformidad con la constitución”, dijo el portavoz de la Comisión de Seguridad Nacional del Parlamento iraní.
La OCS es una organización internacional fundada el 15 de junio de 2001 por los líderes de China, Rusia, Kazajstán, Tayikistán, Kirguistán y Uzbekistán. India y Pakistán se unieron a la OCS en 2005. Los países observadores de la OCS son Afganistán, Belarús Irán y Mongolia, y los países socios son Azerbaiyán, Armenia, Camboya, Nepal, Türkiye y Sri Lanka y tiene como objetivo velar por la seguridad regional, señalando como principales amenazas el terrorismo, el separatismo y el extremismo.