La justicia británica exoneró a un joven de 19 de la acusación de haber causado la muerte de su padre, luego de darle una cachetada en el rostro que terminó provocando la caída del hombre al suelo y el posterior golpe de su cabeza contra el pavimento que desencadenó el desenlace fatal.
Malcolm Callender (48 años) y su hijo Ewan solían tener una rutina de juegos: el padre le daba al chico una cachetada y aguardaba el golpe del joven en una especie de competencia que bajo ningún punto representaba riesgos para ambos.
El 12 de abril del año pasado Ewan y Malcom habían ido juntos a un bar para ver un partido del Newcastle. Al concluir ambos salieron a la calle y se disponían regresar cuando el mayor le dio un golpe en la cara al adolescente.
Luego le ofreció la mejilla a su hijo y le dijo en tono provocativo “bien, puedes tener tu tiro”, siempre dentro del tono de juego entre ambos. Pero esa situación fue el disparador de la tragedia: Ewan aceptó el desafía y le dio un fuerte golpe en la cara a su papá que terminó por lanzarlo hacia atrás, golpeando su cabeza contra la calle.
Callender padre fue trasladado de urgencia al Royal Berkshire Hospital, donde fue diagnosticado con una hemorragia subdural aguda que le ocasionó la muerte horas después.
Minutos antes de ser trasladado, testigos del incidente afirmaron que Ewan gritaba desesperado “¡Despierta, papá! ¡Papá te amo!”, pero en vano ya que había perdido la conciencia.
Tras la muerte el joven fue detenido y permaneció 18 meses encarcelado hasta que fue liberado tras el juicio que lo declaró inocente.