Rusia volvió a recibir una gran derrota política por parte de la comunidad internacional, este jueves 24 de marzo cuando la Asamblea General de la ONU votó una nueva resolución que denuncia su guerra contra Ucrania. El organismo pidió su fin inmediato. Fueron 140 naciones que votaron a favor de censurar a Rusia, un país menos a favor de hacerlo, en comparación con la Asamblea realizada el 2 de marzo pasado.
Es la segunda vez que la Asamblea General nombra directamente a Rusia como agresor, y la resolución renueva la demanda de la Asamblea para que el Kremlin detenga inmediatamente su ofensiva militar. La Asamblea calificó el hecho como “agresión contra Ucrania” y continúa exigiendo un “cese inmediato de las hostilidades de la Federación Rusa contra Ucrania”.
Por otra parte, este jueves la Casa Blanca presentó nuevas sanciones contra 400 personas y entidades que incluyen a las élites rusas, la Duma (Parlamento) y 328 de sus miembros, así como empresas de defensa. En un comunicado, el Gobierno de Estados Unidos informó que las nuevas sanciones fueron impuestas “en estrecha coordinación y asociación con la Unión Europea y el G7″; recordó que el número de “objetivos” sancionados hasta el momento asciende, ahora, a 600.
De igual forma Reino Unido anunció otras sanciones contra 65 industrias estratégicas, bancos y élites empresariales de Rusia, que tienen como objetivo “aquellos que ayudan a la invasión rusa de Ucrania, incluido el Grupo Wagner, múltiples compañías de defensa y (la empresa estatal) Ferrocarriles Rusos”, indicó un comunicado del Gobierno. Reino Unido ha “sancionado a más de 1.000 personas y empresas en virtud del régimen de sanciones contra Rusia desde la invasión”. “Estos oligarcas, empresas y matones a sueldo son cómplices del asesinato de civiles inocentes y es justo que paguen el precio”, aseguró la secretaria de Relaciones Exteriores británica, Liz Truss. Por su parte, el Consejo de Seguridad de la ONU rechazó este miércoles 23 de marzo, por abrumadora mayoría, un proyecto de resolución de Rusia sobre la situación humanitaria en Ucrania.
Sólo China se unió a Rusia para votar a favor del texto, y los otros 13 miembros del Consejo se abstuvieron. El proyecto de resolución expresaba “grave preocupación por el deterioro de la situación humanitaria en Ucrania y sus alrededores”, citando en particular un número creciente de desplazados internos y refugiados del conflicto ucraniano. Si bien condena “todas las violaciones del derecho internacional humanitario y las violaciones de los derechos humanos”, el texto no asigna ninguna responsabilidad por la guerra.