La primera misión espacial tripulada de Boeing culminó el viernes por la noche con el aterrizaje exitoso de una cápsula vacía, mientras que los dos pilotos de prueba permanecen en el espacio. La NASA determinó que el regreso de los pilotos sería demasiado arriesgado, por lo que se quedarán en órbita hasta el próximo año.
Seis horas después de partir desde la Estación Espacial Internacional, la cápsula Starliner aterrizó en paracaídas en el campo de prueba de misiles de White Sands, en Nuevo México. La cápsula descendió con el piloto automático en la oscuridad del desierto, según la transmisión en vivo de la agencia espacial estadounidense.
Este desenlace marca el final de una misión que comenzó con el lanzamiento en junio de la largamente esperada primera misión tripulada del Starliner. La misión, que rápidamente se convirtió en un drama debido a problemas técnicos con la cápsula, puso en duda el regreso de los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams.